Hipólito Mora, uno de los líderes de las autodefensas en Michoacán, aseguró que “falta poquito” para que entreguen las armas, una vez el Gobierno logre la captura de los líderes del cartel de Los Caballeros Templarios. El grupo insurgente está contento con la presencia del Ejército y la Policía en el territorio.

Este lunes, Hipólito Mora, uno de los líderes de las autodefensas en La Ruana, Michoacán, anunció que los grupos insurgentes se sienten contentos con la presencia de las autoridades en la región, luego de que la guerra declarada al cartel de Los Caballeros Templarios disparara la tensión por posibles episodios de violencia.

Mora señaló que la gente se siente tranquila y con más seguridad con la llegada de las fuerzas federales al territorio. “Le agradezco al gobierno que esté trabajando ahí», dijo en una entrevista radial a medios locales.

Pese a que la llegada del Ejército y la Policía alivianó sustancialmente el tenso panorama de Michoacán, el líder de las autodefensas precisó que aún no están listos para abandonar las armas y que esto sucederá una vez el Gobierno detenga a los líderes de Los Caballeros Templarios.

«Queremos esperar un poco más. El gobierno está haciendo bien su trabajo», anotó. De igual manera solicitó que cuando los cabecillas del cartel sean capturados, sus rostros sean transmitidos por televisión. «Nos daría mucha felicidad que los capturen y presenten».

El anuncio vislumbra una eventual dejación de las armas, no obstante, depende del Estado acabar con el cartel de Los Caballeros Templarios, tarea que ha sido un enorme reto difícil de mitigar.

En efecto, este lunes cayó otro presunto líder del cartel, Jesús Vázquez Macías, alias «El Toro», señalado de «como uno de los líderes que mayor violencia genera como integrante del grupo delincuencial que actúa en la región», consigna un comunicado publicado por las autoridades federales.

El texto añade que «en estos seis días no se ha presentado ningún incidente violento y que las actividades comerciales en las comunidades se están recuperando con gradualidad». Hace una semana, se amotinaron varios comercios y se incendiaron ayuntamientos y oficinas federales en Apatzingán, considerada punto focal de Los Caballeros Templarios.