José Mourinho, entrenador del Real Madrid, cumplirá ante el Málaga su partido número 400 como técnico de un equipo de Primera División tras doce años en los banquillos en clubes como el Benfica, Uniao Leiria, Oporto, Chelsea, Inter de Milán y, ahora, en la entidad madridista.

Algo más de una década es el tiempo que ha necesitado el preparador portugués, que debutó al frente de un equipo el 23 de septiembre de 2000 con derrota, para alcanzar esta cifra redonda. Fue con el Benfica y perdió 1-0 contra el Boavista.

Ese fue el inicio de una carrera que continuó con diferente suerte en seis entidades diferentes. En el Benfica, donde sustituyó a Jupp Heynckes, apenas estuvo nueve partidos en la temporada 2000/01 firmando cinco victorias, dos empates y dos derrotas. El siguiente curso fichó por el Uniao Leiria, donde permaneció las diecinueve primeras jornadas de la campaña 2002/2003.

Su trabajo en el Leiria no pasó desapercibido y una oferta del Oporto le hizo cambiar de aires. Allí, a lo largo de tres temporadas, en las que dirigió 83 encuentros de la Liga de Portugal, consiguió sus primeros grandes éxitos. Ganó dos Ligas, una Copa, una Supercopa, una Copa de la UEFA y una Liga de Campeones.

Después de conseguir ese gran palmarés, firmó por el Chelsea inglés. En cuatro cursos, y en 120 encuentros (85 ganados, 25 empataros y diez perdidos), logró dos Premier League, dos Copas de la Liga, una FA Cup y una Supercopa de Inglaterra.

Su siguiente destino fue el Inter de Milán. Al frente del conjunto italiano dirigió 76 duelos con unas estadísticas de 49 victorias, 19 empates y 8 derrotas. En Italia logró su segunda Liga de Campeones y consiguió una Copa, dos Ligas y una Supercopa.

Ahora es el Real Madrid el club en el que Mourinho desarrolla su trabajo. Llegó al club blanco en la temporada 2010/2011. En total, suma 92 partidos en la Liga BBVA en los que ha conocido la derrota en 9 ocasiones, la victoria en 71 y el empate en doce. En sus vitrinas lucen un título de Liga, una Copa del Rey y una Supercopa.

Ante el Málaga dirigirá su encuentro número 400. No lo hará en su mejor momento, después de una semana marcada por el empate contra el Espanyol en el estadio Santiago Bernabéu.

Tras el choque ante el conjunto catalán, reconoció que la Liga estaba «prácticamente perdida» tras colocarse a 13 puntos del líder, el Barcelona. Será el Málaga de Manuel Pellegrini el rival con el que intentará pasar un buen aniversario y olvidar el sofocón del pasado fin de semana

EFE