La Organización Nacional Indígena de Colombia (Onic), aseguró en una rueda de prensa que a partir de este lunes 14 de octubre, cerca de 100 mil indígenas se movilizarán en 29 puntos del país para pedir al Gobierno el cumplimiento de políticas ante la grave situación del pueblo indígena colombiano. De igual manera solicitaron a las Farc y la delegación gubernamental no levantarse de la mesa de negociaciones, en pro de hallar una pronta solución al conflicto.

En el marco de la Segunda Jordana de Indignación Nacional que contempla diferentes movilizaciones entre octubre y noviembre, la Onic decidió convocar a minga popular desde este lunes, en función de expresar ante el Estado su descontento por el olvido político y social a la comunidad indígena colombiana.

Según informa la organización, son cinco las cúsales meritorias de la manifestación en la que se movilizarán cerca de 100 mil indígenas en todo el territorio nacional.

En primera instancia y con motivo del día de resistencia de los pueblos indígenas, la organización inicia la Minga indígena, social y popular en defensa de la vida, el territorio, la autonomía y la soberanía.

“Esta determinación se toma en cumplimiento del Mandato de las Autoridades y las organizaciones que componen nuestra organización y ante la grave situación que viven nuestros Pueblos Indígenas”, dicta un comunicado enviado por la Onic.

De igual manera, pidieron a la delegación de las Farc y a los representantes del Gobierno en La Habana, “no suspender ni levantarse de la mesa hasta tanto no le hayan puesto fin al conflicto armado”.

Bajo el marco de negociaciones con el campesinado luego del paro agrario nacional, esta minga “hará parte del proceso de movilización de los sectores (cafeteros, lecheros, estudiantes, paperos, paneleros, camioneros, arroceros, mineros artesanales, maestros, sindicatos, campesinos y campesinas, entre otros) han venido realizando en las semanas recientes”, señala el comunicado.

Tras numerosas oleadas de violencia durante el paro campesino, y por temor a que los nativos se vean afectados durante la minga por parte de la fuerza pública, el movimiento enfatizó en rechazar “cualquier intento de infiltración, cooptación y constreñimiento de la Minga Indígena y Social por parte de los agentes del Estado y de grupos armados ilegales”.

“Hemos dado instrucciones a nuestra guardia indígena que detenga a quienes pretendan deslegitimar nuestro derecho a la protesta social. Quienes sean capturados en dichas acciones serán juzgados en el marco de la Jurisdicción Especial Indígena”.

Luis Fernando Arias, alto consejero en la Onic, destacó «el compromiso de la comunidad indígena por marchar pacíficamente bajo el marco de civilidad y el respeto de las libertades ciudadanas»

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