La Fiscalía General comenzó un rastreo de los bienes con los que, de prosperar el acuerdo de paz con el Gobierno, las FARC tendrán que reparar a sus víctimas, y que al parecer se encuentran repartidos en al menos 14 países europeos y americanos.
Según una información divulgada por el diario El Tiempo, el 70 % de la fortuna de las Farc se encuentra fuera del país.
Los países donde supuestamente las Farc han invertido son Noruega, Suecia, Finlandia, Islandia, Dinamarca, Holanda, Alemania, Venezuela, Ecuador, Bolivia, México, Honduras, Costa Rica, Panamá y, por supuesto, Colombia.
“Sabemos que sólo un 30 % de esa fortuna está en Colombia. Rastreamos bienes en Alemania, Holanda, Noruega, Dinamarca y Suecia, en donde hay evidencia de sus inversiones”, dijo una fuente del ente acusador a El Tiempo.
Según estiman las autoridades colombianas, las Farc tienen ingresos anuales de cerca de 2 billones de pesos (unos 1.117 millones de dólares) que supuestamente proceden del narcotráfico y luego invierten en negocios inmobiliarios, transporte, cadenas hoteleras y artículos de uso básico.
Con esta iniciativa se trata de evitar lo sucedido durante el proceso de desmovilización de más de 31.000 paramilitares bajo el marco jurídico de Justicia y Paz entre 2003 y 2006, durante el Gobierno del expresidente Álvaro Uribe, quienes repararon a las víctimas con bienes en ruinas y mal escriturados.
El próximo 8 de octubre, delegados del Gobierno y de las FARC inaugurarán en Oslo la primera de las mesas de diálogo de un proceso de paz que parte de una hoja de ruta en la que se contempla la reparación a las víctimas.
De acuerdo a la publicación, el origen de esta investigación tuvo lugar en un rastreo inicial del Departamento del Tesoro estadounidense, que elaboró un listado en el que se mencionaban empresas en Panamá: Istmo S.A., Obras Civiles y Vivienda Industrializada, Selwin International Inc. y Corvay Overseas Corp.
En Colombia el foco está puesto en más de 300.000 hectáreas de tierras en la antigua zona de distensión, una extensión que fue desmilitarizada entre 1998 y 2002 durante los fallidos intentos de paz del expresidente Andrés Pastrana.
De esos terrenos, hay 151.000 hectáreas que fueron traspasadas de forma irregular, otras 97.000 se apropiaron por medio de falsificaciones, 45.000 resultaron de la unión ilegal de parcelas, 17.000 fueron vendidas por debajo del valor catastral y quedan más de 9.000 por revisar.
Las autoridades colombianas repetirán este proceso en otras zonas con tradicional presencia guerrillera, como los departamentos del Meta, Putumayo y Cauca.