La operación salida de James del Real Madrid retomará su curso la próxima semana en cuanto el presidente Florentino Pérez resuelva el tema principal que preocupa en estos momentos al club blanco: la continuidad de Cristiano Ronaldo.
Hasta el momento, el conjunto merengue había frenado toda decisión sobre la salida de jugadores. Entre ellos dos que tienen pie y medio fuera del Bernabéu: James y Morata.
Ambos tienen muy clara su voluntad de abandonar la capital madrileña. Son conscientes de que pocas oportunidades tendrán en el próximo año con Zidane en el banquillo. Y no piensan perder otra campaña en el banquillo con el Mundial de Rusia a la vuelta de la esquina.
El problema vienen por que ambos jugadores tienen preferencia por un destino en común: Manchester. Y en las cuentas del Madrid no entra regalarles dos figuras a un conjunto que será un rival directo para la próxima Champions.
En este sentido, el que lleva la delantera por recalar en Old Trafford es el delantero español. Tiene muy avanzadas las conversaciones con el United y es el elegido por Mourinho para liderar el ataque del equipo.
En el caso de James, tiene toda la voluntad de la directiva de United por ficharle. Saben de su tirón comercial y que se trata de un fichaje que se puede rentabilizar en plazo bastante menor.
Pero a James no le faltarán pretendientes si se cae la operación con el Manchester United. Chelsea y PSG también preguntan insistentemente. Y a estos se ha unido el Milan en los últimos días. El obstáculo para el club italiano viene por el lado de James. El único requisito que ha puesto el colombiano es que el próximo equipo en el que recale sea un candidato a la Champions del próximo año, por lo que queda prácticamente descartado.