Tras un año con un alto crecimiento económico, producto del rebote de la crisis de la pandemia del Covid, las proyecciones de BBVA Reseach revelan que para 2022 el PIB en Colombia tendrá una variación de 4,0% y para el próximo año el aumento sería de 2,8%. Parte de la desaceleración se debe a la moderación saludable que se espera en el consumo final, asociado a una recuperación progresiva de las tasas de ahorro en el país.
“En 2022 y 2023 continuará el proceso de recuperación pero, como era de esperarse, a un ritmo más gradual. Esperamos que el consumo pierda dinamismo y que la inversión en construcción, tanto de vivienda como de obras civiles, lo compense parcialmente. También somos optimistas sobre un mayor dinamismo del sector exportador, tanto en los bienes tradicionales, principalmente asociados a la minería, como en los productos industriales y los agrícolas no tradicionales”, aseguró Juana Téllez, economista jefe de BBVA Research para Colombia.
En el primer informe del año de Situación Colombia, el equipo de analistas de BBVA asegura que el consumo privado tendrá un comportamiento heterogéneo entre sus componentes. Por un lado, el consumo de bienes semidurables y durables se desacelerará. Al contrario, aprender a convivir con el virus y sus nuevas cepas permitirá que el consumo de servicios más asociados a la interacción social gane dinamismo en 2022 y 2023.
La pandemia sigue presente en todo el mundo y las nuevas olas de contagio están en camino. Sin embargo, los efectos de estas olas sobre la economía serán cada vez menores. Afectarán menos la oferta, la demanda, los ahorros y la confianza que las previas. La vacunación, los nuevos tratamientos y, ojalá, la menor severidad contribuirán a esto.
“El mundo sigue afectado por los cuellos de botella en la oferta global de productos y en la logística de transporte, con efectos sobre la actividad y los precios. Esperamos que estos cuellos se mantengan en la primera mitad de 2022, para luego ceder gradualmente”, explica el informe económico.
El empleo y la inflación: los retos del año
Dos de las variables económicas que más impacto tuvieron en 2021 serán los retos de este año. Se trata del empleo que no logra niveles pre pandémicos y la inflación con niveles especialmente altos.
Así las cosas, el empleo seguirá siendo el gran reto de 2022-2023. “Muchas personas, especialmente las mujeres, se mantienen fuera de la fuerza laboral por varias razones (acceso a servicios de cuidado, educación para sus familias, los sectores más rezagados en recuperación económica tienen mayor empleabilidad de mujeres que de hombres, entre otros) afectando su capacidad de generar ingresos”, comentó Téllez
Por su parte, la inflación seguirá alta en la primera parte del año y se espera alcance su pico en el primer trimestre de 2022, para luego ceder gradualmente.
“Este año la inflación cerrará en 4,8% frente al 5,6% del 2021 y el año entrante en 3,6%. Las presiones inflacionarias al inicio del año se deben a los cuellos de botella globales, la inercia inflacionaria, las presiones de costos por el incremento real del salario mínimo y la normalización gradual de las tarifas que se redujeron en la pandemia y que no han vuelto a sus niveles regulares”, explicó Mauricio Hernández, economista de BBVA Research para Colombia.
Dólar y tasas de interés seguirán al alza
Según Alejandro Reyes, economista principal de BBVA Research, se espera una depreciación promedio del peso colombiano del 5,1% este año y una apreciación del 2,4% el año entrante. Es decir que se tendría una tasa de cambio de $3.935 para este año y de $3.842 para el próximo.
“Veremos volatilidad en la tasa de cambio ante los cambios en la postura monetaria de los países desarrollados así como por el proceso electoral colombiano. Estas presiones de devaluación y volatilidad serán más intensas en la primera mitad de 2022”, afirmó Reyes.
Por otra parte, la tasa de intervención del Banco de la República seguirá aumentando hasta encontrar una postura contraccionista a mediados de 2022 y se estabilizará en ese nivel hasta, por lo menos, finales de 2023. “Esperamos que la tasa llegue a 5,75% en comparación con el 3,0% que registró en diciembre de 2021”, dice el informe.
Es hora de pensar en el mediano y el largo plazo
Según el equipo de BBVA Research, es tiempo de planear estructuralmente el país que queremos. Para Téllez, “cuando lo peor de la pandemia en términos económicos parece haber pasado y ante un proceso electoral que se viene, debemos concentrarnos de nuevo en los temas estructurales en los que debe trabajar el país para aumentar el bienestar de los colombianos”.
En el informe se puede leer que se necesita trabajar en la generación de ahorro para financiar la inversión futura. Eso exige aumentar el ingreso de las familias con mayor formalidad, productividad, calidad y cantidad de la educación y generando las condiciones para que se pueda volver a la fuerza laboral formal.
Además, para mejorar los balances macroeconómicos, debemos generar ingresos desde afuera, a través del comercio exterior e inversión directa, que nos permitan disminuir el déficit en la cuenta corriente y financiarlo bien. Finalmente, en el frente público, se requiere dibujar el tamaño de Estado que queremos y que sea sostenible en el largo plazo.