Días sin IVA podrían generar un alivio momentáneo en el incremento de la inflación

La inflación en septiembre tuvo una variación mensual de 0,38%, estando en línea con lo que esperábamos. Con esto se ubica en 4,51% en términos anuales, 7 puntos básicos (pb) por encima de lo observado en el mes de agosto.

Si bien los alimentos mantuvieron una tendencia alcista como veníamos observando recientemente, especialmente por las proteínas animales y los alimentos procesados, y volvieron a ocupar los primeros lugares entre las divisiones con las mayores variaciones mensuales, la mayor contribución vino por cuenta de la división de alojamiento y servicios públicos.

El servicio de agua y alcantarillado, debido a cambios regulatorios, contribuyó con una parte importante del dato mensual, al igual que el incremento en las tarifas del servicio de energía eléctrica.

Por su parte, y como se podía anticipar, los combustibles y la comida para consumo fuera del hogar también presentaron incrementos importantes en el mes.

Por otro lado, la sorpresa se observó en la división de educación, que tuvo una variación mensual de -2,33% y contrarrestó parte del incremento en otros rubros gracias a descuentos que se implementaron en las matrículas de algunas instituciones públicas de educación superior.

En los próximos meses los alimentos continuarán desacelerándose, pero se mantendrán en niveles altos, al mismo tiempo seguiremos viendo presiones en los rubros importados por un tipo de cambio que se mantiene alto.

Sin embargo, la realización de los días sin IVA en los meses restantes podría generar un alivio transitorio sobre la inflación de los rubros que se benefician de esta política, pero que se devolvería al inicio del próximo año.

Con esto, la inflación cerraría el año muy cerca del 4,8%, pero se aceleraría en el primer trimestre del próximo año debido al ajuste estacional de ciertas tarifas que dependen de la inflación del año inmediatamente anterior y del salario mínimo.