En el marco del Salón Internacional del Automóvil, Allianz Partners, compañía del Grupo Allianz, líder mundial en servicios de asistencia para autos, hogar y viajes; en cabeza de Natacha Bouaziz, Directora Global de Asistencia para Autos, presentó las últimas tendencias en movilidad, nuevas regulaciones y desafíos frente al nuevo consumidor, así como la aplicación de nuevas tecnologías en los servicios de asistencia vial, entre otros temas con relación al sector económico, automotor y seguros.
A pesar de la crisis que enfrenta el sector automotriz en Colombia, la compañía presenta un balance en el cual el futuro es prometedor para la industria. Según la funcionaria, son tres las grandes oportunidades que tiene el sector, las proyecciones apuntan a que los automotores estén conectados, sean autónomos, eléctricos y brinden una alternativa que mejore la movilidad de los colombianos, basados en las tendencias y el impacto del mercado.
Asegura Natacha Bouaziz que: “el 95 % de los vehículos nuevos vendidos en todo el mundo estarán conectados en 2030, frente al 50% actual. Además, el 95 % de estos vehículos tendrá conectividad intermedia y avanzada”.
El gran reto que enfrenta la industria tiene que ver con el impacto potencial, el cual será enfocado en maximizar los datos del coche para mejorar la movilidad, así como el acceso a los datos del vehículo en lo cual hace falta trabajar, según explica Bouaziz.
Por otra parte, las tendencias frente a los vehículos eléctricos (VE) apuntan a que se analicen las necesidades del usuario, atendiendo las dinámicas gubernamentales y aplicando estrategias que permitan una integración aceptable por las comunidades. Claro está, la perspectiva del mercado que presenta Allianz Partners refiere directamente que a futuro las ventas mundiales anuales de automotores para el turismo y vehículos ligeros seguirán creciendo.
El impacto potencial apunta a la necesidad de proporcionar ayudas adaptadas a los VE y mejorar los retrasos en el desarrollo de infraestructuras.
Además, explica Bouaziz que los vehículos autónomos (VA) se encuentran en un buen momento, tal es el caso del NEXO de Hyundai, el cual está aprobado actualmente como coche de Nivel 4 (Alta automatización). Es decir, las funciones pueden conducir el vehículo en condiciones limitadas y no funcionará a menos que se cumplan todas las condiciones requeridas y cuenta con grandes beneficios como lo es: menor frecuencia de siniestros, acceso a los datos del vehículo, y menor necesidad de asistencia a la movilidad
Las perspectivas del mercado de asistencia establecen que para el 2023 el objetivo es que generen ingresos de 1.000 millones de euros, con un crecimiento del 4 % anual para el 2027 y 5.100 millones de usuarios para ese año, los cuales generarán 211 USD de ingresos anuales. La mayor parte de los ingresos se generan en China, advierte la Directora Global.
También refiere que se proyecta un mayor uso del vehículo, lo que conlleva más asistencia; una necesidad de ofrecer soluciones de asistencia multimodal, con lo cual más tipos de vehículos requieren una red compleja.
Nuevas necesidades de movilidad de los consumidores
La compañía presentó un balance detallado en el que se evidencian las necesidades de movilidad que demandan los usuarios: Economía, Ecología, Seguridad y Salud, Facilidad de uso. Según Bouaziz el 58 % de los consumidores actuales cambiaría a VE, el 62 % sustituiría el 2º vehículo por una nueva solución de movilidad y el 58 % ha utilizado el autoservicio de alquiler de bicicletas.
Claro está, advierte que el coche privado no desaparecerá, revelando que el 80 % de los conductores prefieren tener un vehículo personal, el 91 % prefieren ser propietarios a abonarse (crédito) o alquilar automotores.
Ahora, la experiencia de usuario es esencial en la industria: el 59 % de los conductores prefieren tener acceso a servicios de asistencia por teléfono, el 44 % están dispuestos a pagar más por un servicio de calidad.
Las proyecciones de Allianz Partners apuntan a que para el 2032, a nivel nacional no se podrán vender carros ni motos de combustión, considerando las dinámicas gubernamentales y los planes que se tienen para hacer frente al cambio climático.
Asimismo, se espera que para el 2035, Bogotá cuente con diseños de zonas de alta congestión o alta contaminación, limitando la circulación a cero y de bajas emisiones. Finalmente, explica la compañía que para el 2040, se proyecta que en las vías de Bogotá se vea un aumento considerable de vehículos de cero y bajas emisiones.