Hoy el Banco de la República decidió incrementar su tasa de intervención en 100 puntos básicos, una decisión que se tomó por voto mayoritario, en el cual vimos cuatro personas votando por el incremento de un punto porcentual, una persona votando por incremento inferior de 25 puntos básicos y un miembro de la junta votando por un incremento incluso por encima de 125 puntos básicos.
Dentro del diagnóstico que nos mostró el Banco Central, está la lectura de que la economía colombiana puede crecer este año cerca del 8 % lo cual es una tasa realmente alta si se compara con el resto de la región e incluso con las economías a nivel global. Esto ha llevado en particular a que el consumo privado se haya expandido de una forma bastante significativa durante este año, hemos visto ese reflejo por ejemplo en el crecimiento de la cartera de los créditos de consumo y en este contexto el Banco considera prudente seguir aumentando su tasa de interés.
Adicional a esto se está encontrando que las expectativas de inflación a uno y dos años siguen bastante desviadas de la meta del Banco de la República, para finales del 2023 se está esperando una inflación cercana al 7.5 % mientras que, para finales del 2024, el consenso de analistas pone esa expectativa cerca del 4.5 %.
En este contexto y sumado a lo anterior, se encuentra que el déficit externo en Colombia está en niveles históricamente altos, el déficit de la cuenta corriente está superando el 7 % del PIB y en un contexto en el que la liquidez internacional está retirándose, es una situación de vulnerabilidad importante para la economía colombiana que el Banco también quiere contribuir a reducir incrementando sus tasas de intervención.
¿Qué implica esto para la situación de la economía colombiana? Que vamos a seguir viendo cómo este incremento de las tasas de interés se transmite a las tasas activas de la economía tanto para los préstamos como para los depósitos, y en ese sentido el mensaje hacia los consumidores sigue siendo preferir instrumentos de ahorro o depósitos remunerados, en lugar de adquirir nuevas deudas, ya el costo de crédito se está incrementando, vemos que la tasa de usura supera el 40 % y las señales del Banco de la República nos sugieren ser un poco más prudentes con esas decisiones de gasto.
Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria considera que la tasa del Banco Central siga subiendo, probablemente en enero tengamos un nuevo movimiento al alza de la tasa de interés y sólo pueda llegar una pausa cuando encontremos el pico en la inflación, el cual nosotros estamos esperando, se de hacia el mes de diciembre.