Foto: tomada de bbc.com
El Ministerio de Defensa de Brasil ha matizado este jueves que pese a no encontrar indicio alguno de fraude durante las pasadas elecciones eso no significa que se pueda descartar la posibilidad de que se produjeran irregularidades.
En una nota difundida un día después de que enviara al Tribunal Superior Electoral (TSE) sus conclusiones sobre las elecciones, Defensa matiza que “para evitar distorsiones en el contenido” del informe se aclara que aunque los técnicos militares no lo han indicado, “no se excluye la posibilidad de existencia de fraude o inconsistencia en las urnas electrónicas”.
El comunicado no incluye nada nuevo, pero sí critica que se esté intentando controlar el contenido del informe anterior, cuya publicación se espera con gran expectación, en especial entre los seguidores de Jair Bolsonaro.
Durante la presentación de aquel informe, el ministro de Defensa de Brasil, Paulo Nogueira, demandó al TSE una autorización para investigar cómo poder mejorar el sistema electrónico de votación, a pesar de que “no se observaron discrepancias entre los resultados impresos y el recuento final”, según las propias conclusiones.
Las sugerencias presentes en el informe de las Fuerzas Armadas podrían alimentar las teorías de la conspiración de los seguidores de Bolsonaro, quien ha estado atacando al TSE y al sistema de votación de Brasil prácticamente desde que se impuso en las elecciones de 2018.
Ha sido precisamente por estos ataques al sistema de votación y las urnas electrónicas por los que el presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva, le ha reclamado a Bolsonaro que pida disculpas, así como por el papel que ha obligado a desempeñar a las Fuerzas Armadas durante estas elecciones.
“Bolsonaro tiene una deuda con el pueblo brasileño, pida disculpas por la cantidad de mentiras que dijo durante las elecciones y contra las urnas electrónicas”, ha dicho Lula este jueves durante un acto en Brasilia.
Lula también ha reclamado a su rival que emita también una disculpa pública a las Fuerza Armadas, a las cuales habría “humillado, ha subrayado, después de que el informe sobre las elecciones se haya quedado en nado. “Hace tanto tiempo que ha estado acusando. Un presidente no puede mentir, no es aceptable”, ha remarcado.