La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, ha defendido este jueves la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), la justicia transicional creada en Colombia a raíz de los acuerdos de paz, y ha pedido al Gobierno que “garantice su plena independencia”.
Para Bachelet, la JEP es uno de los instrumentos “más poderosos” para superar el conflicto armado y “romper el ciclo de violencia e impunidad” en el país, tal y como recoge un comunicado.
Así, ha expresado todo su apoyo al Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición, que “constituye la piedra angular del histórico acuerdo de paz” firmado en 2016 entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ahora extintas.
Bachelet, que se ha reunido este mismo jueves con la Comisión de la Verdad, la JEP y la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas –los tres mecanismos que forman el sistema de justicia transicional colombiano–, ha manifestado que se han logrado “avances significativos” gracias a la “valentía de todos los que trabajan para que se conozca la verdad”.
“Todas cumplen un rol fundamental y único para asegurar la participación de las víctimas y la satisfacción de sus derechos a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición”, ha afirmado.
En este sentido, ha argumentado que su “contribución a la consolidación de la paz en Colombia ha sido y sigue siendo esencial”. Por ello, ha pedido a las autoridades que “apoyen y cooperen de forma incondicional con la JEP” y garanticen así la “plena independencia de sus mecanismos”.
Esto incluye, tal y como ha expresado, “su autonomía financiera y la posibilidad de operar en un entorno seguro”. “La verdad y la rendición de cuentas para los crímenes cometidos es crucial para restaurar la dignidad de las víctimas y contribuir a la reconciliación, para el beneficio de toda la sociedad colombiana”, ha zanjado.