El expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, fue recibido este martes en el Movistar Arena de Bogotá como todo una estrella de rock, previo a su participación en el EXMA, la plataforma especializada en actualización de alto nivel para los profesionales de negocios en Latinoamérica que congregó durante dos días a miles de asistentes en el escenario capitalino.

Obama llegó al escenario con su particular carisma y con un “Hola Colombia”, rompió de inmediato el hielo, y acto seguido un “Yes we can”, fue suficiente para ganarse la ovación de los miles de asistentes que esperaban su conferencia.

El exmandatario norteamericano fue preciso y cauteloso en los temas que expuso durante su intervención, todos alejados de la coyuntura política que vive su país y el nuestro.

En resumen, el también Premio nobel de Paz no dio papaya y se dedicó hablar de temas de liderazgo enfocados a combatir la desigualdad y apostarle a la educación como motor de cambio.

“El cambio que estamos viviendo en esta época avanza muy rápido. Es algo nunca antes visto en la historia de la humanidad. Hay la oportunidad de ver lo bueno y malo en estos cambios. La parte mala es que genera más desigualdad y tensiones en la generosidad social”, dijo al inicio de su panel con el conferencista de marketing, Andy Stalman.

En medio de la conferencia, Obama resaltó la labor de su esposa Michelle Obama y de sus hijas en el apoyo que le han brindado durante su carrera política y ahora cómo líder a nivel mundial.

«Lo que he aprendido de Michelle es algo que entendí porque me criaron mi mamá y mi abuela, es algo q sabía pero cuando la veía aprendía más y más: si en tu organización, en tu vida o en tu familia no muestras respeto igualitario por las mujeres, ese escenario va a fracasar»