El Presidente Gustavo Petro pidió al nuevo Director del Fondo de Programas Especiales para la Paz (Fondopaz), Pablo Francisco Pardo Velasco, aplicar un proceso de reingeniería en todo el sistema de instituciones encargadas del tema de la paz para cumplir con los acuerdos suscritos con las Farc.
El Jefe de Estado señaló que “lo que si yo quiero es una reingeniería de todo eso, porque lo que tenemos es que cumplir el primer punto del acuerdo de paz y este Gobierno lo va a cumplir”.
El Mandatario explicó: “me he encontrado en la administración un laberinto de instituciones en el tema de la paz en Colombia. Creo que es un mecanismo para no hacerla. Ninguna tiene la capacidad para volver realidad los acuerdos de paz con las Farc, ninguna. No se construyeron para cumplir los acuerdos”.
Sin embargo, enfatizo el Presidente, “el mandato popular que nos confirió el estar en este Palacio sí nos lo demanda. Quienes ganaron, a diferencia del plebiscito anterior, fueron los que consideran que hay que cumplir el acuerdo de paz”.
Al respecto, añadió que esas instituciones, a su juicio, no cumplen con la tarea encomendada debido a que “primero, porque están todas aquí cerca de este Palacio, o cerca. Segunda, porque no tienen presupuesto. Tercera, porque son dispersas. Cuarta, porque solo tocan temas marginales de los acuerdos”.
Como ejemplo citó las dificultades que ha encontrado en establecer un monto preciso para adquirir más de 3 millones de hectáreas de tierra fértil y entregarla a los campesinos y –dijo– “nadie supo. Nadie se había hecho la pregunta. Ninguna institución de esas laberínticas, de las que estoy hablando, se había preguntado cómo se hace para cumplir con el primer punto del acuerdo”.
El Presidente Petro reiteró que con base en sondeos en las regiones se ha llegado a una cifra aproximada para adquirir las tierras, frente a lo cual agregó: “En las regiones calculan que una hectárea está entre 10 y 20 millones de hectáreas. Eso significa que el primer punto del acuerdo de paz está entre 30 y 60 billones de pesos”.
En ese sentido, exhortó a los colombianos a hacer “el esfuerzo, no en gastarnos la plata en la guerra, sino en la paz. Y la paz empieza por gastarse un dinero público en compras de tierra fértil que equivalgan a tres millones de hectáreas para cumplir el primer punto”.