Por unanimidad la Cámara de Representantes aprobó en segundo debate el proyecto de ley de comida chatarra de coautoría del Representante Mauricio Toro, que busca que a través de sellos frontales y de fácil identificación, se pueda conocer los productos que tengan exceso de azúcar, sodio o grasas y así proteger la salud de niños, niñas, jóvenes y todos los colombianos.
“Con este proyecto estamos garantizando que los colombianos tengan información honesta, sencilla, para cuidar su salud, y poder tomar decisiones sobre el consumo o no de productos con excesivos niveles de azúcar, sodio, grasas y educolorantes. Luego de tres intentos en los cuales el proyecto había sido archivado por el lobby de la industria, en esta oportunidad hemos logrado con el apoyo de todos los partidos políticos, sacar adelante una propuesta que es urgente y necesaria para promover mejores hábitos de alimentación”, declaró el congresista.
El Proyecto otorga facultades al Gobierno Nacional en cabeza del Ministerio de Salud, para establecer las categorías de productos que serán obligados a usar los sellos frontales de advertencia, cuando contengan niveles excesivos de los nutrientes críticos para la salud humana. El Ministerio de Salud y Protección Social, podrá reglamentar los parámetros técnicos definiendo la forma, figura, símbolos, textos, valores máximos, colores, tamaño y ubicación en los empaques de los productos que deban contenerlo, basándose en evidencia científica disponible.
El congresista Toro lamenta la actitud del Gobierno Nacional, “es muy preocupante la actitud del Gobierno Nacional. Por un lado, el Ministerio de Salud ha guardado un silencio absoluto frente a este proyecto y nunca presentó un concepto y el Ministerio de Comercio, radicó un concepto que buscaba empantanar la discusión, alegando que los compromisos comerciales de Colombia deben primar sobre los intereses de salud pública del país.
“Es muy lamentable esta actitud, las discusiones deben darse de frente a la ciudadanía, y no por acuerdos y favores definidos a puerta cerrada. Afortunadamente la Cámara de Representantes ha demostrado su independencia y especialmente, su gran compromiso con la salud de los colombianos. Esto es un gran logro para la salud pública”, puntualizó.
El punto más álgido de la votación se dio en torno a las restricciones a la publicidad de comestibles y bebidas ultraprocesados en franja infantil y familiar, así como el uso de juguetes, personajes, accesorios, adhesivos, incentivos u otros similares usados como ganchos comerciales para atraer atención de población infantil. Finalmente, este punto fue eliminado por la mayoría de Congresistas, argumentando que no es recomendable tener restricciones a la publicidad.
El proyecto pasa a tercer debate en Comisión Séptima del Senado de la República.