Confidencial Colombia – En la última semana ha habido un boom con la aplicación llamada FaceApp, encargada de tomar la foto de una persona joven y mostrar la versión vieja de ella; pero como el dicho colombiano popular: «De eso tan bueno -en realidad- no dan tanto».

Así como la famosa ‘Arts and culture’ de Google -que tomaba una foto de un rostro y buscaba una obra de arte antigua que fuera similar- FaceApp tiene como atributo el ser gratuita, pero como tal ellos se quedan con los datos de las personas que se registran y ahí es donde está la trampa de esta aplicación que es tendencia.

Este tipo de empresas se sostienen con cajones de publicidad que ponen dentro de la aplicación, pero el negocio jugoso está con la venta de datos. Ya que la afluencia de esta aplicación es masiva, esta compañía puede vender sus datos a multinacionales expertas con los algoritmos.

En el contrato para aceptar ingresar a la página, FaceApp se reserva el derecho de alquilar o vender la información suministrada; sin embargo, en la letra menuda hay una excepción que permite compartirlo «con organizaciones de terceros que nos ayudan a proporcionarle el servicio», lo cual no es tan específico.

De esta aplicación solamente se sabe que fue creada por Wireless Lab y el CEO de la compañía es el ingeniero ruso Yaroslav Goncharov. Su sede se encuentra en Wilmington, Delaware -estado reconocido por ser una especie de paraíso fiscal-. Por eso es mejor pensárselo 2 veces antes de acceder a una aplicación de este calibre.