La reconocida actriz y directora del Círculo Colombiano de Artistas, María Eugenia Penagos, en entrevista para Confidencial Colombia nos confesó sus luchas, lagrimas y alegrías en el gran reto de crear y mantener un gremio artístico en un país donde el arte no es valorado como debe ser.
¿Por qué está triste María Eugenia?
María Eugenia: Los teatros estamos en la lucha por el Impuesto Predial que es muy elevado para nosotros porque nos tienen como comerciales, yo pensaba y muchos pensábamos que estábamos a paz y salvo porque el año pasado hicimos un esfuerzo grande para ganarnos una exención, resulta que debemos 32 millones de pesos que tenemos que pagar antes de diciembre. Sí me enloquecí, claro y dice uno Dios mío, pero es que a punta de teatro no se puede.
Pero comercial, cuál comercial en Catastro nos preguntaban, ¿no será que ustedes venden camisetas?, no, no vendemos camisetas, ¿será que venden luz en el teatro?, no vendemos luz del teatro. ¿Será que de pronto tienen un negocio?, pero cuál negocio, si tuviéramos negocio, hombre, no estaríamos dedicados al arte. Salí quebrantada, decir bueno y esto con que se come, dígame cómo se consiguen 32 millones a punta de teatro. Cuando te encuentras de frente con un impuesto predial y unos intereses que son de agiotista tú te enloqueces, pero no, seguimos adelante.
¿Cómo les fue con la economía naranja?
María Eugenia: Eso es lo más salvaje que tú te puedas imaginar, porque tú tienes que hacer un proyecto, lo presentas si te lo aprueban lo cuelgas a ver si aparece un empresario que quiera patrocinar, entonces tú dices bueno allí dormirá el sueño de los justos hasta ver a qué empresario le puede gustar el proyecto. Igual lo hago y lo pongo en mi página e invito a los empresarios a que miren a ver si les interesa claro, y tienes que pagar póliza, tienes que hacer un súper proyecto con un asesor y todo eso y resulta que es para colgarlo, entonces no, eso le puede servir a Movistar Arena empresas así, porque pues a las empresas grandes les interesa los negocios grandes, pero a uno lo ven como tan chiquito.
¿Cómo surgió el Circulo Colombino de Artistas?
María Eugenia: En 1.957 yo no estaba, estaban otros artistas entre ellos estaba Bernardo Romero Lozano, como empezaban la televisión decidieron que para luchar por los derechos se necesitaba un sindicato por el estilo de lo que tenían en México que era ‘La Banda’ que todavía existe por supuesto, entonces crearon el Círculo Colombiano de Artistas, para empezar a fijar tarifas, para empezar a manifestarse, a decir bueno queremos que este oficio se reglamente queremos que nos paguen lo justo, queremos que las grabaciones sean así y en fin. Una lucha que empezó hace muchísimos años y que todavía continuamos, logramos un acuerdo un pacto Cica-Asomedios sobre tarifas, eso fue en 1.987 que todavía está vigente.
Hemos trabajado en defensa también de los artistas mayores por la carencia de trabajo, por las necesidades que han atravesado durante toda la vida, porque llega un momento de la vida en que, pues son los más abandonados porque los productores jefes de casting, dicen que las canas y las arrugas no venden entonces van desechando a la gente.
¿Han trabajado de la mano del Gobierno Nacional?
Continuamente hay que trabajar en función de que se cumplan las cosas, de ver cómo también con el Gobierno Distrital y Gobierno Nacional, conquistamos muchas cosas que se necesitan para que el arte funcione, para que podamos desarrollar nuestro trabajo, porque estamos en un país donde el arte y la cultura no se le ha dado el movimiento que requiere, qué significa eso, que el ciudadano no tiene en su canasta familiar para ir a un teatro, cómo ir a un espectáculo, cómo prepararse, también porque las electivas son importantes en la vida de la gente y mucho más en esos tiempos, es resiliencia el arte es sanador. Trabajamos aquí un taller de inclusión con mucha gente que ni siquiera puede pagar, nos toca a nosotros ver cómo hacemos para apoyarlos porque es formación para los ciudadanos a base de arte a base de sanación a base de valores, entonces el Círculo sigue trabajando.
¿Qué legado dejan a los artistas?
María Eugenia: En 1989 creamos la Sociedad de Gestión de Derechos Intelectuales que se llama Actores Sociedad Colombiana de Gestión, es la que se encarga de hacer los recaudos correspondientes a la ley 1403 que fue una ley que yo trabajé durante muchos años, y que concede a los artistas intérpretes del audiovisual, el derecho de remuneración por comunicación pública, ese fue un legado que dejé.
Aparte de eso estamos trabajando desde hace muchos años en lo que es llamado Estampilla Procultura que hoy en día se convirtió en los Beneficios Especiales Periódicos (BEPS), mediante la cual muchos artistas están ya recibiendo una mensualidad que es vitalicia.
¿Qué formación imparten?
María Eugenia: Tenemos un teatro hermoso abierto para los artistas porque tenemos una política especial de grupos adoptados, o sea, aquellos grupos de teatro que montan una obra de teatro y no tienen donde presentarse. Aquí tenemos las puertas abiertas para que traigan su obra, hablamos con ellos les ayudamos en toda la gestión en la divulgación con nuestra plataforma con todo.
Tenemos también un taller maravilloso para niños, niñas y jóvenes que le hemos dado mucho más vuelo ahora pospandemia o durante la pandemia, por ese trabajo de resiliencia que hay que hacer cuando los hogares se vieron convertidos en aulas escolares y en sitios de trabajo y todos pasamos por la angustia, el dolor, la tristeza, la desesperación, la carencia de espacio, porque estábamos confinados, entonces estamos trabajando muy duro en eso para lograr una recuperación de esos ciudadanos.
Tenemos temporadas permanentes de teatro durante todo el año en este momento ya somos sala concertada con IDARTES, mediante un proyecto que presentamos y que hay que presentarlo cada año, es un trabajo muy fuerte, muy intenso, muy mal agradecido económicamente.
¿Cuántos miembros tienen el Círculo Colombiano de Artistas y qué otros aportes le dejan al sector artístico?
María Eugenia: Somos 325 miembros, quiero destacar que el teatro lo hemos hecho con el día a día, además por que participamos en un proyecto en la Ley de Espectáculos Públicos fuimos ganadores, pudimos dotarlo con las mejores luces, sonido y acústica creo que eso es importante destacarlo, porque esto es una ley que existe y que las convocatorias salen a través de la Secretaría de Cultura de Recreación y Deportes, entonces sí es importante saberlo porque muchos de los teatros hemos podido salir adelante de esa manera.
Tenemos un día a día muy muy difícil, pero el propósito siempre es pensar que los artistas desarrollamos un trabajo social, que la ciudadanía necesita de nosotros y los otros compañeros también necesitan de nosotros, o sea, eso aquí nos llevaría si eso fuera viable en este país a una unión, una unión muy difícil, la unidad en Colombia tú sabes que es muy complicada sobre todo por el tema de la polarización en todo, pero la lucha permanece es hacía eso, que la gente se interese, que los artistas se interesen, que haya un sentido de pertenencia porque lamentablemente yo tengo un dicho: “aquí trabajamos por los artistas, para los artistas, a pesar de los artistas”.
Entonces eso impide que la fe decaiga eso te lleva a que en cada momento tú digas, no, nada seguimos adelante, mire de esto no nos baja nadie. Por eso es que hemos podido seguir adelante, por eso estamos en esta sede desde 1987 habiéndola pagado habiendo la sacado adelante, entonces ni siquiera un impuesto predial nos puede bloquear la salida.
¿Cómo le ha ido al gremio laboralmente con las productoras como Disney, Amazón y Netflix?
María Eugenia: No nos ha ido, es un tema muy difícil que todavía estamos trabajando y donde te digo se necesita la unión porque a veces vienen a grabar y no sabes dónde están y los artistas que van no dicen nada, porque dice a mí que me paguen y punto, o sea, es que esa vaina siempre ha existido de que “queremos que luchen por nosotros”, y cuando eso se presenta dice: “Pero no tanto, déjenme que yo haga mis propias cosas”, entonces ahí es donde te digo yo: qué falta unidad.
Estamos aquí luchando, trabajando, somos muy poquitos, porque la pandemia nos dio muy duro, bastante duro, con las puertas cerradas año casi dos años, estamos aquí reinventándonos todos los días haciendo cosas, todos los días divulgando, todos los días tratando de salir adelante para poder cubrir las deudas producidas por la pandemia, y al mismo tiempo a hacer los montajes teatrales, los montajes musicales a seguir adelante con los talleres atender a la ciudadanía, no paramos.