El ministro TIC, Mauricio Lizcano, manifestó que luego de nueve rondas de ofertas por parte de los proponentes, se adjudicaron los cuatro bloques de 80 Mhz en la banda de 3.500, por un valor de $1,37 billones. A cada uno de los operadores le fue asignado un bloque.
La Unión Temporal Tigo-Movistar adquirió el primer bloque, por un valor de $318.306 millones. El segundo bloque le fue adjudicado a WOM, por un valor de $318.340 millones. El tercero fue para la empresa brasilera Telecall, un nuevo operador que llega al país, por valor de $318.333 millones, y el último bloque le fue adjudicado a Claro, por un valor de $411.384 millones.
Gracias a este proceso, el país tendrá una inversión cercana a los $28 billones en los próximos 10 años, es decir, un promedio de $2,8 billones anuales.
A través de las Obligaciones de Hacer establecidas en la subasta, los operadores deberán impulsar el desarrollo de proyectos de conectividad en las zonas rurales, apartadas y vulnerables del país, por medio del despliegue de infraestructura de telecomunicaciones. Esto es de manera adicional, y como otra forma de pago por la contraprestación económica del uso del espectro radioeléctrico.