La Guardia Civil ha desarticulado en la localidad de Santa Fe (Granada) un grupo criminal dedicado al cultivo de cannabis y a la elaboración y tráfico de marihuana en el marco de la operación Nazarí 11 Ordo Asil, que se ha saldado con ocho personas detenidas, dos de ellas de nacionalidad venezolana y seis españolas, como presuntas autoras de los delitos contra la salud pública por tráfico de droga, tenencia ilícita de armas, defraudación de electricidad y organización criminal.
Los investigadores de la Guardia Civil han realizado seis registros domiciliarios en los que se han intervenido 1.042 plantas de cannabis sativa, unas en proceso de crecimiento y otras en proceso de secado; una pistola marca Colt Goverment del calibre 45 municionada y lista para hacer fuego; dinero en efectivo; así como envasadoras al vacío, selladoras y básculas de precisión. Además de lo intervenido, se ha procedido al bloqueo preventivo de siete cuentas bancarias y a la anotación preventiva de embargo de siete bienes inmuebles y veintiún vehículos.
La Guardia Civil averiguó que existía un grupo criminal en Santa Fe que se dedicaban al cultivo intensivo de cannabis sativa, a la elaboración de marihuana y al tráfico de esta droga. Los investigadores descubrieron quiénes lo integraban, las ocho personas ahora detenidas, y que estaban perfectamente organizados y jerarquizados. La organización poseía varios centros de producción de marihuana en la localidad de Santa Fe y un centro de elaboración principal en un cortijo situado en las afueras.
En este último se aglutinaba toda la marihuana recolectada en los anteriores centros de producción y se procedía a su secado y posterior envasado al vacío. Al frente del mencionado centro se encontraban dos personas de nacionalidad venezolana, cuya función era preparar la sustancia y proteger la misma de posibles vuelcos por parte de otras organizaciones criminales, para lo cual poseían un arma de fuego tipo pistola del calibre 45 municionada y lista para ser usada si fuera necesario.
La pistola intervenida no consta en las bases de datos de armas de la Guardia Civil, por lo que se ha enviado al Servicio de Criminalística para su análisis. Los investigadores encontraron en el cortijo un zulo oculto bajo el suelo del dormitorio dotado con una apertura hidráulica motorizada. En este zulo los narcotraficantes guardaban la marihuana envasada y cultivaban una plantación “indoor” de cannabis sativa.
Esta actuación de la Guardia Civil se incardina en la operación Miller, que se está desarrollando a nivel nacional contra el cultivo y tráfico ilegal de marihuana.