El expresidente de la FIFA, acusado de desviar fondos por valor de 80 millones de dólares, aseguró no tenerle miedo a la sentencia que podría mandarlo a la cárcel. Blatter criticó las nuevas políticas que intenta promover a Gianni Infantino y acusó de confabulación a los abogados estadounidenses de la FIFA.

Joseph Blatter no parece temerle a nada ni a nadie. En una entrevista que concedió a al diario Le Monde, el expresidente de la FIFA no dejó títere con cabeza afimando que no le tiene miedo acabar sus días en la cárcel, y criticó sin remordimientos al actual presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y por último atacó con dureza a los ‘estadounidenses’ a los que culpa de haberlo conducido a su situación actual

Hace pocos días se conocía que el Comité de Ética de la FIFA le ratificaba la sanción de seis años por la que no podrá ejercer ninguna acción vinculada al deporte. Blatter recoció que no recurrirá esta decisión ante la justicia suiza, pero sí que solicitará a los países miembros de la FIFA que rectifiquen esta sentencia y «cambiar, disminuir o quitar la suspensión».

Una vez aclarado este punto, Blatter pasó al ataque contra su sucesor al mando de la FIFA, Gianni Infantino. Criticó abiertamente las nuevas iniciativas que intenta llevar a cabo, como la de un mundial con más equipos, o los programas que intenta promover en África. «¿Y por qué no poner 128 equipos? Si prometes a las federaciones que habrá más equipos piden más. El formato actual con 32 equipos es la buena fórmula y lo ha demostrado», explicó.

En cuanto a la investigación que se lleva a cabo sobre un desvío de fondos por valor de 80 millones de dólares en forma de aumento salarial o primas por relacionar Mundiales, Blatter afirmó no haber cobrado nunca tales cantidades. «Nunca he cobrado dinero indebidamente», afirmó Blatter que acusó de «falso» el informe de los abogados estadounidenses que lo incriman en este caso.

Blatter ve una mano negra en todo esto, y en su opinión fueron estos estadounidenses los que conspiraron en su contra por no haberles otorgado el Mundial 2022, que finalmente se concedió a Qatar. El exmandatario explicó la elección de el país árabe por encima del resto como una «influencia política en el último minuto» para conseguirlo.

En este sentido Blatter lo justifica apoyándose en que este mismo movimiento confabulado se realizó con el caso del exvicepresidente dela UEFA Michel Platini, al cual también se echaron en su contra por apoyar el mundial de Qatar.

El exmandatario suizo reconoció haber cometido errores de vigilancia interna durante su presidencia, pero admite que reaccionó a tiempo expulsando de la organización a varios miembros del Comité Ejecutivo y creando el Comité de Ética que curiosamente es el que ahora le ha corroborado la sanción. «¿Cómo podía saber antes? Mi dirección se basaba en la fe y en la confianza. Esa es mi educación: fue demasiado ‘naif’ e indulgente«, concluyó Blatter.