El drama histórico de Benoît Jacquot, relatado en el tiempo de cuando reinó María Antonieta, es una muestra de lo que se vivió en la época a partir de la mirada de Sidonie Laborde, la lectora de la reina. A partir de su historia, se entiende la decepción que un plebeyo en algún momento pudo vivir al sentirse acobijado de los altos poderes que tarde o temprano lo defraudarían.

Desde un principio, el ritmo de esta historia es turbio y confuso, pero apropósito. En esta cinta la escenografía juega un papel muy importante. Con detalle, podrá observar en cada cuadro los encantadores paisajes del Palacio de Versalles y merodear por sus pasillos en los que un día, caminaron el Rey Luis XVI y su esposa, la Reina María Antonieta.

En medio del fin, cerca a la toma de la Bastilla, Jacquot logró captar con precisión cómo la aristocracia vivía este momento. El ejemplo propio es la Reina, alejada de la realidad, preocupada por sus vestidos y sus caprichos, nunca imaginó terminar en el principio de una lista de ‘cabezas por cortar’.

Sin embargo, en este mundo no solo vivía ella. Acompañada de sus sirvientes, dentro de esta historia se refleja la confianza que María Antonieta puso en Laborde, su lectora, quien se dedicaba en cuerpo y alma a cumplir con lo que la reina pedía.

El director de Adiós a la Reina acertó con Léa Seydoux, quien interpreta a Sidonie Laborde. Esta joven supo caracterizar desde su ser, los comportamientos y matices que el personaje necesitaba para comprender las emociones que perteneciendo a la plebeyez debía sentir.

Laborde, pretensiosa de ser preferida por la reina se niega a creer en los rumores de que la Bastilla había sido tomada. En ese instante, su reina estaba en problemas, pero la lectora toma sin cuidado esta noticia, ya que se siente protegida estando al lado de María Antonieta. Es al cabo de un par de días en donde cae en cuenta de su labor a disposición de esta señora, y es cuando enfrenta la decepción al saber que ha sido utilizada como anzuelo para salvar del pueblo enfurecido a Gabrielle de Polignac , interpretada por Virginie Ledoyen y por la cual hay el rumor de que la reina esta enamorada de ella.

Adiós a la Reina se estrenará este 25 de octubre en Cinema Paraíso. Un drama histórico que tiene que ver.