Doce horas después de implantado el nuevo sistema de recolección de basuras, las calles de varios barrios de Bogotá tienen cientos de bolsas negras y blancas acumuladas. Los habitantes comienzan a quejarse y los camiones del nuevo sistema recogen lentamente los residuos.

La hora cero comenzó. Desde la madrugada de este martes arrancó el nuevo sistema de recolección de basuras, basado en el beneficio para los recicladores y marcado por una gran polémica debido a que será el acueducto, y no los operadores privados, los que recogerán los residuos.

Desde muy tempranos, cientos de volquetas y algunos camiones de la empresa Aseo Capital iniciaron el lento proceso de recolección de basura. Mientras tanto, los habitantes de la ciudad amanecieron con los residuos en los andenes y calles de la ciudad.

«Esto está lleno de basura», señaló una vendedora ambulante de la calle 53 con avenida Caracas, que tuvo que poner sus productos cerca de varias bolsas blancas y negras que se acomodaban en el lugar. Eso le sucedió a verios comerciantes del barrio chapinero.

Cerca de allí, varios hombres de Aseo Capital intentaban recoger a toda marcha los residuos de una ciudad que produce miles de toneladas de basura al día. «Ahí vamos, lento» dijo el conductor del camión recolector, mientras su ayudante entraba en un consultorio a sacar los desechos.

Empleados de Basura cero, el nuevo sistema de recolección implementado por el gobierno distrital, usan las volquetas destinadas por la administración para recoger los residuos y apenas llenan la capacidad de los vehículos van a depositarlos al relleno de Doña Juana.

Confidencial Colombia recorrió las calles de varios barrios de Bogotá y fotografió una ciudad que trata de superar un lío capital. Imágenes.