El desconocimiento de los padres, las pobres políticas implementadas por el gobierno y la falta de experiencia de algunos especialistas a la hora de diagnosticar, se convierten en las principales causas de aislamiento de un número importante de niños con autismo.

La escasa información sobre este trastorno, hace que las familias se sientan avergonzadas y no recurran a especialistas. “Considero que una de las causas es el temor de los padres. Teniendo en cuenta que algunos profesionales de la salud no tienen la experiencia para diagnosticar e intervenir en este tipo de población”, declara Diana Carolina Benjumea, fonoaudióloga de la Universidad del Rosario y docente de la Corporación Universitaria Iberoamericana.

Benjumea, agrega que los padres informados pueden determinar si sus hijos presentan este trastorno. Por ejemplo, si el niño no evidencia interés en la socialización, no establece contacto visual, si sus habilidades lingüísticas no corresponden a lo esperado para su edad, si no acata instrucciones o si para indicar algo conduce al adulto a un lugar y realiza señalamientos.

Los especialistas en el autismo asumen que una intervención oportuna y a temprana edad puede permitir una vida más llevadera para las personas con autismo, y en muchos casos, una inclusión a la población y aceptación por parte de ésta.

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