Cómo es el fútbol. Se hablaba de crisis, de falta de jerarquía, de juego, de identidad, de carácter, de ideas… Las críticas de todo tipo se cernían sobre la selección antes de afrontar estos dos partidos de las eliminatorias. Y se agrandaron más aún con la victoria por la mínima contra Bolivia. Había muchas dudas para este duelo en Ecuador. Injustas para un equipo que demostró en Quito que no se puede dejar de creer en ellos.

La Selección exhibió uno de los partidos más serios de la era Pékerman. Sólidos en defensa y letales a la contra. La Triclor se comportó como una máquina sin errores de fábrica aparentes. Todas las líneas aportaron en lo colectivo para conformar una malla impenetrable ante la que Ecuador fue incapaz de encontrar las costuras. A la contra Colombia entiende su fútbol. Es el código que mejor interpretan las lanzas que tiene arriba, Cuadrado y James. Los dos fueron las estrellas en Ecuador, apoyados en todo momento por un Borja y Cardona.

Cada vez que Colombia salía al galope, había perfume de gol. Así llegaron los dos zarpazos en la primera mitad. James abrió el marcador, casi sin querer con un remate que rebotó en el defensa y después en su espalda antes de entrar en la meta ecuatoriana. La definición no hace justicia a una buena apertura de Sánchez para Borja, que continuó de mejor forma el delantero con un pase a tres dedos.

El golpe dejó noqueado a Ecuador y a los pocos minutos Colombia le daba el segundo gancho ganador. De nuevo al contragolpe encontraron los espacios, Cardona habilitó con un balón picado y James y este le puso el balón con su zurda justo donde llegaba Cuadrado. El de Necoclí solo tuvo que empujar a puerta.

Ni la altura, ni el farragoso césped, ni Ecuador. Nada podía contra una Colombia que siguió interpretando el mismo papel serio hasta el final. Ni una distracción, ni un baile de más. Lo que se vio fue un equipo aplicado en la causa, y solidario en el esfuerzo. ni un reproche se puede llevar ninguno de los presentes en Atahualpa. Mostraron pundonor y el carácter de un grupo que quiere reservar ya su tiquete a Rusia.

Ecuador buscó como meterle mano al asunto, pero no tenía cómo. Colombia no dejó ni un rendija abierta. Más cerca tuvo el tercero antes que alertarse por que le disminuyeran la ventaja. Borja dispuso de su gol en varias ocasiones, pero tanto desgaste le nubló la visión de cara a puerta.

El cansancio hizo efecto en todos. El desgaste fue máximo y Pékerman rotó al grupo. Entraron Uribe, Daniel Torres y Bacca. Colombia no cambió ni una pizca su compostura. Firmes y directos, como la marcha que han puesto con estos seis puntos ante Bolivia y Ecuador para tener medio tiquete asegurado a Rusia. Empezaron esta parón de selecciones fuera de los puestos que dan acceso directo y se finalizan la ronda segundos a la espera de lo que haga Uruguay.