El Ejército de Liberación Nacional pidió este miércoles al Gobierno que presione a la minera canadiense Braeval para que entregue los títulos mineros reclamados como condición para liberar a un geólogo que tiene secuestrado desde enero.

«Voceros del Gobierno en declaraciones a los medios de comunicación muestran su interés por la pronta liberación del canadiense, pero no hacen ningún esfuerzo para que la multinacional Braeval Mining Corporation devuelva los 4 títulos mineros que despojó a las comunidades de esa zona de la Serranía de San Lucas», indicó el ELN en un comunicado.

El geólogo canadiense Jernoc Wobert, empleado de Braeval, fue secuestrado por el ELN el pasado 18 de enero junto a dos peruanos y a tres colombianos cuando descansaban en un campamento de una mina de oro en Norosí, un municipio del norteño departamento de Bolívar.

Los tres colombianos y los dos peruanos fueron liberados el 15 de febrero, pero no Wobert, que además es el vicepresidente de exploración de la Braeval.

En el comunicado publicado en la página web del ELN y en la revista digital Insurrección, la Dirección del Frente Darío Ramírez Castro, responsable del secuestro, llama en esta ocasión al Gobierno colombiano para que presione a la minera a «devolver» los títulos.

El comunicado añade que «si al Gobierno le preocupara lograr un desenlace incruento de esta retención, debería agilizar la devolución de estos títulos a sus legítimos dueños, que son los mineros tradicionales de esa zona».

El ELN, fundado en 1964 y actualmente con unos 1.500 combatientes, enmarcó el secuestro de estos trabajadores en su lucha contra las multinacionales, a las que acusa de expoliar los recursos naturales colombianos, y contra las políticas minero-energéticas del Gobierno del presidente Juan Manuel Santos.

En anteriores comunicados han explicado que los títulos mineros que reclama, correspondientes a las minas de Casa de Barro y Mina Seca, «originalmente fueron concedidos a las comunidades de mineros tradicionales que allí viven, pero debido a maniobras de intermediarios corruptos, tales títulos terminaron en manos de la empresa canadiense, con sede en Toronto».

Asimismo, el ELN ha rechazado las operaciones militares para lograr la libertad del geólogo y en un comunicado reciente incluso denunció que hay «fuerzas paramilitares que hacen parte del dispositivo que desarrolla el Gobierno».

EFE