Las compras han sido la tónica dominante hoy en el mercado español tanto de deuda, como de renta variable. La entrada de dinero ha provocado que la rentabilidad del bono español descienda hasta el 4,26%.

La confianza de los inversores se apoya en la posibilidad de que los líderes europeos suavicen las medidas de austeridad. Y también en el éxito de la subasta del Tesoro, que ha colocado 3.010 millones de euros en Letras a tres y nueve meses. En el caso de los títulos a tres meses los ha adjudicado al 0,12%, el interés más bajo de la historia. Asimismo, el mercado está descontando la posibilidad de que el Banco Central Europeo adopte nuevas medidas de estímulo en su próxima reunión, como una bajada de tipos de interés. Y no hay que olvidar tampoco el excedente de liquidez que ha provocado la inyección masiva del banco central de Japón.

Esto se ha traducido en una caída de la rentabilidad del bono español a 10 años hasta el 4,22%, lo que supone regresar a niveles de finales de 2010. Como consecuencia, la prima de riesgo ha perdido el nivel de los 300 puntos básicos, algo que no sucedía desde febrero de 2012. La menor presión también se refleja en los plazos más cortos, con el interés del bono a dos años por debajo del 2% (1,88%) y los títulos a cinco años en el 3,05%.

En el caso del Ibex, el selectivo se ha anotado una subida del 3,26% hasta los 8.289 puntos. La bolsa española ha sido una de las que más ha subido en Europa impulsada, sobre todo, por los bancos, que son los más beneficiados de la caída del diferencial y se han anotado ganancias superiores al 4%.

Pero no solo el mercado español refleja el optimismo de los inversores. En el resto de plazas europeas las subidas son similares. El Cac ha sumado un 3,5%, el Dax un 2,4%, el Eurostoxx un 3% y el Mib un 2,9%. Al avance de la bolsa italiana contribuye también el hecho de que el lunes Giorgio Napolitano juró el cargo del presidente de la República y dio un ultimátum a los partidos políticos para formar un gobierno de coalición después de que la dimisión de Pier Luigi Bersani haya facilitado el camino para un ejecutivo con el partido de Silvio Berlusconi.

Y en el secundario de deuda se repite la historia. Los ahorradores están comprando todo tipo de bonos, desde los más seguros como los alemanes, cuya rentabilidad ha caído hasta el 1,247% o los franceses, que se mueven en el mínimo histórico del 1,703%, hasta deuda periférica. De hecho, los bonos italianos han perdido el 4% y se cambian al 3,94%. Su prima de riesgo ha descendido hasta los 269 puntos. Asimismo, los bonos irlandeses cotizan al 3,52% y los portugueses al 5,75%.

De este modo, los inversores han decidido quedarse hoy solo con las noticias positivas y han decidido obviar datos como la caída de la actividad manufacturera se en China, que se encuentra al borde de la contracción o del PMI alemán que ha descendido por debajo de los 50 puntos básicos y ha regresado a niveles de diciembre.

Tomado de ElConfidencial.com