Jorge Durán Silva sorprendió con otra terrible salida en falso. El que en algún momento dijo que el Concejo se estaba volviendo una “merienda de negros”, dijo esta vez que las mujeres lesbianas son unas “mujerzuelas”.

Durán Silva es del Partido Liberal y hace 35 años tiene una curul en el Concejo. Lleva años, muchos años, tomando decisiones con respecto a Bogotá, y sus declaraciones polémicas, no propiamente políticas, han sido las que lo han dado a conocer.

El domingo durante un debate en el Concejo de la capital, sobre el uso del vehículo compartido, se dirigió a la audiencia haciéndole una particular petición al secretario de movilidad de la ciudad: “ojalá en el planteamiento que usted ha hecho, pueda ser que manden una dama y que a esa dama le gusten los hombres, no que le gusten las mujeres, porque eso si no me gusta a mí… que me manden ese tipo de mujerzuelas”, dijo.

En cuanto se conoció el video de la “audaz” intervención, él se volvió la comidilla de los medios de comunicación, de diferentes miembros de la colectividad a la que pertenece, de ciudadanos, tuiteros y políticos que condenaron sus señalamientos.

Luego de todo el alboroto por las redes sociales, por los noticieros, en prensa y en Internet, claro, Simón Gaviria, presidente del Partido, informó que el comité ético lo iba a investigar y que él le iba a pedir que rectificara sus palabras.

Durán Silva argumentó en una carta escrita en tercera persona, que él jamás dijo la palabra lesbiana y que las respeta como a cualquier otra persona. Insinuó que todo había sido un invento de la gente, o el común error de interpretación en la que se escudan últimamente para justificar sus errores: “mayor falacia e imprecisión no puede tener un medio de comunicación”.

Seguramente miles de personas están difamando al concejal, que hoy no solamente es calificado como racista y homofóbico, sino que quedó públicamente expuesto para que pidan su cabeza, todo por el bien de la ciudad, los negros y las mujerzuelas.