Media hora antes de ser presentado como refuerzo de Boca Juniors, se le informó a Andrés Felipe Román que su traspaso no iba a poder ser posible. Cumplía su sueño y cuando le informaron, el futbolista rompió en llanto.

En horas de la mañana le realizaron los exámenes médicos, pero hubo un problema. Se armó un comité médico que decidiría si el futbolista sería contratado o no, de hecho repitieron el procedimiento y confirmó la causa que impedía el traspaso: una miocardiopatía hipertrópica. El presidente de Boca Juniors Jorge Ameal puso el club a disposición de él, pero por su salud no lo contrataron.

La miocardia hipetrópica involucra el engrosamiento del músculo cardiaco y es la primera causa de muertes en el mundo relacionadas con el corazón. Esta enfermedad generalmente tiene su causa en mutaciones genéticas. Ahora mismo su carrera está en vilo.

Millonarios, por medio de un comunicado señaló que a los futbolistas se les hace periódicamente ciertos exámenes, pero que de ahora en adelante harán «exámenes complementarios que los especialistas consideren necesarios». El club señaló que Andrés Felipe Román nunca presentó alertas en los entrenamientos ni en los exámenes practicados.

Boca Juniors estaba dispuesto a pagar 1,5 millones de dólares por el 50 % del pase del futbolista y firmaría contrato por los próximos tres años.

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