Economía colombiana crecerá 6,8% este año y en 2023 tendrá una desaceleración saludable

Foto: Juana Telllez, Jefe para Colombia de BBVA Research

Durante este año la actividad económica continuará sorprendiendo al alza por el gran dinamismo del consumo privado y la inversión en maquinaria y equipo. El más reciente informe de proyecciones económicas de BBVA Research estima que el PIB nacional crecerá 6,8% anual en 2022. Luego, en 2023, tras una menor dinámica del consumo privado, debido principalmente al alza de las tasas de interés y a la desaceleración del crecimiento del empleo,de la inversión y de las exportaciones, habrá una desaceleración saludable que se verá reflejada en un crecimiento de 2,0% para la economía.

El impacto de la guerra en Ucrania, el fenómeno inflacionario en el mundo y la presión de las altas tasas de interés han hecho que las economías emergentes estén viviendo situaciones nunca antes vistas, Colombia no ha sido la excepción. Pese a esto, según Mauricio Hernández, economista de BBVA Research para Colombia, “la actividad económica continúa sorprendiendo al alza por el gran dinamismo del consumo privado y la inversión en maquinaria y equipo. Estimamos que la economía crecerá 6,8% anual este año”.

Bajo este panorama se espera que los choques inflacionarios mantengan un fuerte impacto, determinando que la inflación al consumidor cierre en 2022 en 9,2% y moderándose gradualmente en 2023 al 5,0%, gracias a un menor dinamismo de la demanda interna y el efecto de la actuación de la política monetaria. “La inflación se ha dispersado desde los alimentos hacia una base más amplia de bienes mostrando presiones de demanda. En este escenario, el Banco de la República ya ha subido los tipos hasta el 7,5% y continuará su ciclo, llevando el tipo de interés al 9,0%”, explicó Alejandro Reyes, economista principal de BBVA Research.

El informe de los analistas plantea que el dinamismo de la demanda interna continúa presionando el desequilibrio externo de 2022. Por esta razón, la cuenta corriente cerrará con un déficit del 5,3% del PIB. Sin embargo, en 2023 la desaceleración de la demanda interna favorecerá un ajuste saludable de la misma hasta 4,5% del PIB.

“El desequilibrio fiscal continúa siendo un reto para los próximos años a pesar de la mejora reciente tanto en la senda de déficit  como en la deuda como porcentaje del PIB”, explica Juana Téllez, economista Jefe para Colombia de BBVA Research.

En cuanto a una de las variables que más ha presentado volatilidad en los últimos días, el dólar, BBVA Research espera que la presión reciente se modere, hacia el último trimestre del año para llevar la tasa promedio del año y del 2023 en torno a los 4.050 pesos por dólar.

El panorama internacional se mantiene tenso

En el plano internacional la inflación se mantiene en niveles inusualmente altos. Según el informe de BBVA Research, las presiones se han visto reforzadas recientemente por el impacto de la guerra de Ucrania sobre el precio de las materias primas y el mantenimiento de los cuellos de botella, esto en un entorno donde la demanda se mantiene fuerte.

“El crecimiento global se desacelerará significativamente, con crecimientos negativos en más de un trimestre en EE.UU. y Europa, lo que contribuirá a la caída de la inflación, que, aun así, permanecerá muy por encima de los objetivos en el corto plazo”, cita el estudio de Situación Colombia.

Además, se prevé que la Reserva Federal de Estados Unidos subirá las tasas de interés hasta un 4,0%, a la vez que seguirá vendiendo activos para reducir su balance. Por su parte el Banco Central Europeo comienza ya su ciclo alcista de tipos, que será menos agresivo que el de la FED por las menores presiones de demanda.

Retos para Colombia en 2023 en medio de un proceso de desaceleración saludable

Para los analistas de BBVA Research, en 2023 los sectores relacionados con la construcción, el Gobierno y la reactivación de los servicios liderarán el crecimiento. La desaceleración global limitará el crecimiento de los sectores más relacionados con las exportaciones (agroindustria), mientras que la moderación del consumo y del comercio exterior reducirán el desempeño del comercio y el transporte.

Para el próximo año se navegará en un entorno internacional menos favorable en medio de una desaceleración saludable del crecimiento local, por lo que se tendrá que proteger a los hogares más vulnerables para seguir cerrando las cicatrices que dejó la pandemia; promover la inversión y el empleo formal con miras a aumentar el crecimiento potencial; diseñar reformas que incrementen la productividad y la competitividad del aparato productivo colombiano y materializar y consolidar los avances en la transición energética y la sostenibilidad ambiental.