El campo y la mujer en Colombia, a debate en Confidencial Colombia

Historias que Inspiran, Experiencias que Transforman

La Mujer y el Campo: La importancia del papel que desempeña la mujer en la economía rural y en la seguridad alimentaria de Colombia

Un proyecto de Confidencial Colombia con el apoyo del Grupo Energía Bogotá

artes 22 de noviembre a partir de las 9:00 am

Conéctese en vivo por www.confidencialcolombia.com

 

En Confidencial Colombia le apostamos a abrir espacios transformadores, ejercicios de construcción y generación de consciencia colectiva, conversación, reflexión y debate que traten temas de interés, coyuntura e importancia nacional y aborden temáticas ambientales, sociales, culturales, de salud pública, empresariales y económicas, relacionadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, determinantes en la construcción de valores y de una sociedad consciente, diversa, equitativa, justa, incluyente y responsable que propenda por el bienestar, el respeto y la vida digna de todos los colombianos y la imagen, progreso y desarrollo del país.

En el país se presentan cifras relevantes en materia de desnutrición, hambre y pobreza, especialmente en el sector rural. Este sector tiene las siguientes particularidades: la tierra en posesión de pequeños propietarios y donde se explotan los predios a través del trabajo familiar; en las familias se presenta una división del trabajo donde el hombre ejerce funciones productivas y la mujer funciones reproductivas, del cuidado y productivas.

Por un lado, la situación de las mujeres rurales en Colombia, que según las cifras más recientes del DANE son 5.8 millones y representan el 48.2% de la población total que habita en el campo, sigue siendo preocupante y desesperanzadora lo cual nos plantea a todos los actores un reto país.

Desde otra perspectiva, las mujeres que viven en el campo y la periferia participan en la producción de alimentos, generan ingresos monetarios y en especie para sus hogares, lo cual mejora de alguna forma la calidad de vida de estas y sus familias.

Familia y campo

En el ámbito familiar contribuyen con el cuidado de los hijos, los adultos mayores, los familiares en condición de vulnerabilidad y otros miembros del hogar y en lo comunitario, su liderazgo, participación y voz son importantes en la solución de problemas del entorno y en la consecución de recursos para diferentes proyectos de apoyo a la comunidad.

Por lo tanto, se puede interpretar que las mujeres tienen una participación activa en la economía rural, en la seguridad alimentaria y nutricional de sus familias y por ende son un gran apoyo en las comunidades donde tienen influencia, pues desde lo productivo hasta lo comunitario es evidente el aporte que estas hacen y el apoyo que son para la construcción de ambientes que generen bienestar.

Seguimos viviendo la crisis de pobreza y seguridad alimentaria que se presentó durante la pandemia y los efectos adversos y negativos de la alta inflación, la ola invernal y la guerra entre Rusia y Ucrania representan la continuidad de los altos precios de los alimentos, poniendo el problema del hambre y la seguridad alimentaria como crítico y de crucial importancia en la agenda del país. Se trata de un problema urgente que demanda la presencia de todos los actores y una acción multisectorial.

Por lo anterior y siendo conscientes, coherentes y consecuentes con nuestra motivación y propósito y con el apoyo del Grupo Energía Bogotá, Confidencial Colombia ha organizado para el 22 de noviembre de 9:00 a 11:00 am un conversatorio en donde durante 2 horas trataremos estos temas en un espacio donde intervendrán varios actores, expertos y referentes, estableciendo un debate de alta calidad y relevancia proporcionando a la audiencia información de importancia e interés, actual, vigente y de primera mano.

En esta oportunidad contaremos con la participación de importantes y reconocidas mujeres expertas la Mujer Rural y la importancia del papel que desempeña en la economía y en la seguridad alimentaria de Colombia:

Panelistas

Adriana Senior Mojica: Mujer líder del sector agroalimentario y solidario de Colombia. Experta en agronegocios, comercio exterior y emprendimiento. Actualmente es la CEO la Corporación Colombia Internacional – CCI, en donde impulsa el programa 500 mil agroempresarias CCI, meta al año 2030.

Gina Pérez Soto: Fue la directora de la Dirección de Mujer Rural del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural hasta agosto del año en curso. Se ha desempeñado en diversos cargos en el sector público, con más de 10 años de experiencia en temas de desarrollo económico, sector agropecuario y pesca, medio ambiente, turismo, emprendimiento, trabajo con comunidades, cooperación y relaciones internacionales.

Carol Varela: 24 años de experiencia como docente, consultora/asesora en planeación, ejecución y coordinación de proyectos sociales relacionados con la ejecución de políticas públicas, población diversa, participación ciudadana, relacionamiento intercultural, obras de infraestructura, educación, generación de ingresos, empleabilidad y gestión empresarial. Actualmente es la Gerente Social Transmisión del Grupo Energía Bogotá.

Vanesa Giraldo: Ha trabajado con mujeres campesinas, ex-combatientes y migrantes en temas de justicia reproductiva, paz ambiental y saberes locales en salud. Sus principales proyectos de investigación se han desarrollado en el Eje Cafetero, Bogotá y el Piedemonte Amazónico. Actualmente es investigadora y colaboradora científica del Instituto Colombo Alemán para la Paz – CAPAZ – Centro de Excelencia en Investigación y Docencia, con quienes participa en la Red Salud Paz y en el Colectivo Caquetá Cuenta.

Familia Murillo Barajas:

Campesinos del Altiplano Cundiboyacense ubicados en Guasca, Cundinamarca, quienes con su empresa familiar son todo un ejemplo a seguir y replicar para los campesinos de Colombia.

Clementina Barajas: Doña Tina como le dicen sus amigos, es una mujer emprendedora de 68 años. Dedicó su vida a la agricultura orgánica y lleva alrededor de 40 años investigando, estudiando y cuidando su entorno. Su amor por  la tierra ha dado fruto con una gran empresa familiar denominada Clementina Orgánicos, que se dedica a la producción y comercialización de productos orgánicos certificados.

Luis Antonio Murillo: Agricultor guasqueño de 70 años, dueño de la Finca San Luis donde se desarrolló el proyecto Clementina Orgánicos. Su rol allí es el de cuidar y preservar nuestras áreas de conservación con sus grandes aliadas “angelitas”,  las cuales se dedican a polinizar nuestra flora para obtener los mejores frutos y brindarle productos deliciosos y nutritivos a los clientes.

Andrea Murillo Barajas: Hija de Don Luis Antonio y Doña Tina, ingeniería agroecológica de profesión que le permite continuar con el amor por la tierra que le inculcaron sus padres. Esto ha permitido doblar la producción y continuar con sus productos orgánicos. Actualmente tiene 29 años y trabaja para Clementina Orgánicos compartiendo sus conocimientos y formalizando algunos procesos.

Clementina Orgánicos 

Clementina Orgánicos es una empresa familiar que inició en el año 2003. Nace por iniciativa de la Señora Clementina Barajas con el apoyo incondicional de su esposo e hijos. Esta familia de origen cundiboyacense trabajaban en Bogotá y múltiples circunstancias los llevaron a tomar la decisión de retornar al campo teniendo una idea clara: Empezar a SEMBRAR SU PROPIA COMIDA y así lo hicieron.

Iniciaron con su huerta casera para autoconsumo, ventas a la familia más cercana y otros vecinos, luego vieron la oportunidad de comercializar los productos a nivel local en el municipio de Guasca. Con el pasar del tiempo y con la ayuda de sus hijos y nietos, empezaron a ofrecer el producto en la capital y fue así que se empezaron a llevar domicilios a la ciudad de Bogotá con una oferta y variedad reducida de alimentos.

Con el paso de los años, el proyecto ya tenía forma y tomó fuerza, aumentando la producción y diversificando el portafolio de productos desarrollados en la finca provenientes de la agricultura y la crianza de animales para seguridad alimentaria, su comercialización y aprovechamiento económico. Una vez organizado todo esto, se logró tener un grupo de clientes fijos, lo cual también permitió generar empleos a la familia y a personas de la región. Este crecimiento también tomo fuerza porque se empezó a conocer la Terapia Gerson; la cual se basa en una alimentación de zumos, batidos y sopas de origen orgánico que ayuda a contrarrestar enfermedades terminales como el cáncer y la diabetes, y otras  enfermedades.

La Señora Clementina cuenta con más de 20 años de experiencia en el sector del Agro, ha realizado diferentes cursos agrícolas con el Sena en temas de siembra amigable, producción sostenible, agricultura orgánica y negocios verdes, entre otros.

En el año 2017, se presentó la oportunidad de participar en una convocatoria de la Gobernación de Cundinamarca, en alianza con FONADE y el SENA para el proyecto FONDO EMPRENDER, del cual la familia salió favorecida. Este proyecto le dio mucha más fuerza y reconocimiento a CLEMENTINA ORGANICOS SAS. El proyecto se empezó a desarrollar en el año siguiente y su ejecución tardo 1 año, todo salió muy bien y afortunadamente Clementina y su familia pudieron cumplir con todas las expectativas, llevando a cabo todas las exigencias y requerimientos que el FONDO EMPRENDER solicitaba.

El proyecto trajo muchos beneficios para la empresa, tales como:

  • Invernadero nuevo, sistema de riego, moto-cultivador, molino de compostaje y ayuda para pago de nóminas, entre otros.
  • Adicionalmente la empresa se formalizó en muchos aspectos: se lleva una contabilidad, los empleados están con contrato formal, cuentan con SG-SST (Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo) y estamos en proceso de recertificación orgánica.

Actualmente la empresa tiene un comportamiento estable, que le permite todos sus procesos sean sostenibles y generar empleos a una gran parte de la familia y también a unos colaboradores externos.

Clementina Orgánicos tiene su sede en la finca agroecológica San Luis en el municipio de Guasca en el departamento de Cundinamarca, tiene una extensión de 8 fanegadas, y se dedican a la producción agrícola, a la crianza de animales y al cuidado y protección de áreas de conservación de bosque, en estas áreas de conservación se pueden encontrar fuentes hídricas, fauna y flora silvestre, que pueden ser caminadas en las jornadas de visitas programadas a empresas o grupos.

Actualmente el proyecto Clementina Orgánicos también funciona como escuela de producción orgánica que le ha permitido a la ingeniera Andrea, a Don Luis y a la Señora Clementina, compartir sus conocimientos con universidades, fundaciones, empresas, grupos de interés y con la comunidad en general.

 

Datos de contacto Clementina Orgánicos:

Redes: Facebook @clementinaorganicos

Instagram @cementinaorganicos

Ventas y pedidos:

Email: [email protected]

Celular y Whatsapp: 320 4646918