Al menos ocho personas han muerto, entre ellas dos menores de edad, y otras 14 han resultado heridas después de que un grupo de hombres armados irrumpiese el martes por la noche en una vivienda en la que se velaba un cadáver en la localidad mexicana de Cuernavaca, en el estado de Morelos.

La Fiscalía estatal ha explicado en un comunicado que las autoridades recibieron los primeros avisos a las 22.40 y, en ellos, se alertaba de disparos de armas de fuego en la colonia Antonio Barona. Según pudo comprobarse luego, varias personas habían irrumpido en un domicilio «accionando armas largas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas».

Las víctimas velaban el cuerpo de un joven que había sufrido el lunes u accidente de tráfico. Las autoridades trabajan con la hipótesis de que este incidente «deriva de la operación de grupos delictivos» y han podido vincular las armas utilizadas en el tiroteo con otros ataques recientes.

El gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo, ha solicitado la «coordinación permanente» de las distintas administraciones para garantizar el esclarecimiento de la matanza, «haciendo énfasis que no habrá impunidad», según la nota difundida por el Ministerio Público.