Estados Unidos ha incluido a Rusia en su lista de países que fomentan el tráfico de personas y ha alertado de que la crisis migratoria provocada por la invasión rusa de Ucrania puede desencadenar en un riesgo humanitario “sin precedentes”.
Así lo ha expresado el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, durante la presentación de la Trafficking in Persons (TIP) de 2022, una lista presentada este martes en la que también están incluidos países con los que Washington no mantiene buenas relaciones como son China, Siria, Cuba, o Irán.
Blinken ha apuntado que la guerra en Ucrania y sus consecuencia no solo ha provocado que “millones de ucranianos” hayan tenido que huir de sus hogares, sino que también ha “exacerbado” la inseguridad alimentaria y el tráfico de personas “en todo el mundo”, haciendo “altamente vulnerables” a mujeres y niños.
“Estamos profundamente preocupados por los riesgos de explotación de quienes se enfrentan a los desplazamientos internos por las guerras, así como de quienes huyen de Ucrania, donde el 90 por ciento son mujeres y niños”, señala el informe, que cubre el período entre el 1 de abril de 2021 al 31 de marzo de 2022.
A pesar de que el texto solo abarca un mes del conflicto en Ucrania, Blinken sostiene que la “invasión a gran escala” ordenada por el presidente ruso, Vladimir Putin, fue suficiente para hacer “significativamente vulnerables a “los millones de refugiados que huyen de Ucrania”.
Estados Unidos ha colocado a Rusia en la categoría de nivel 3 junto a otros 21 países –como Birmania, Afganistán, o Corea del Norte–, al considerar que “no hace lo suficiente” para combatir el tráfico de personas, e incluso le ha colocado en otra ristra de once Estados cuyo gobierno está involucrado en esta explotación.
A su vez, Rusia ha sido señalado por ser uno de los doce Estados presentes que cuentan con Fuerzas Armadas gubernamentales, Policía, u otras fuerzas de seguridad o apoyadas por el gobierno “que reclutan o usan niños soldados”, detalla la CNN.