Georgia ha prohibido este miércoles el aborto a partir de las seis semanas de embarazo después de que un tribunal de apelaciones haya aprobado una ley que en 2019 había sido bloqueada y que ahora podrá entrar en vigor tras la anulación del Tribunal Supremo de Estados Unidos.
El alto tribunal estadounidense revocó el fallo Roe contra Wade que reconoció por primera vez el derecho de las mujeres al aborto sin restricciones durante el primer trimestre del embarazo, un precedente legal que se lleva usando en el país desde 1973.
En este sentido, el Tribunal de Apelaciones del Undécimo Circuito ha anulado una sentencia de un tribunal inferior que bloqueaba la definición de persona de la ley, permitiendo que los embriones y fetos se definan como “personas” según la ley de Georgia, tal y como ha informado el diario ‘The Wall Street Journal‘.
La ley prohíbe la mayoría de los abortos después de “un latido humano detectable”, con excepciones para emergencias médicas, casos de violación e incesto que hayan sido denunciados a la Policía y si se determina que un feto no es viable por problemas médicos.
Georgia se une así a un creciente número de estados que prohíben o restringen los abortos en el país norteamericano. Muchas de las leyes han entrado en vigor después de que el Tribunal Supremo anulara el mes pasado el caso Roe contra Wade, devolviendo la cuestión de la legalidad del aborto a los estados.
El Tribunal del 11° Circuito ha recalcado que “queda claro que no existe ningún derecho al aborto en la Constitución, por lo que Georgia puede prohibirlos”.
El tribunal emitió una suspensión de la medida cautelar de la ley dictada por el tribunal inferior, lo que permite su aplicación inmediata.
Los grupos de defensa del derecho al aborto, han calificado la medida de “muy poco ortodoxa“, y han asegurado que seguirían presionando para ampliar el acceso al aborto en Georgia.
“Esta cruel prohibición del aborto negaría a nuestras pacientes el derecho a tomar decisiones sobre sus propios embarazos, cuerpos y futuros”, ha subrayado en un comunicado la directora ejecutiva del Feminist Women’s Health Center, Kwajelyn J. Jackson.
El gobernador de Georgia, Brian Kemp, ha indicado que la decisión del Tribunal de apelaciones “afirma nuestra promesa de proteger la vida en todas las etapas”. El republicano busca la reelección en noviembre, cuando se enfrentará a la demócrata Stacey Abrams que ha calificado la ley de Georgia de 2019 como draconiana.
“Cuando sea elegida como la próxima gobernadora de Georgia, lideraré la lucha para derogar esta ley y devolver el poder a las mujeres”, ha afirmado Abrams.
Kemp firmó la ley en el momento en que varios estados liderados por los conservadores aprobaron prohibiciones similares del aborto de seis semanas, denominadas por sus partidarios “proyectos de ley de latidos“. En ese momento, la legislación se enfrentó a la oposición de actores, cineastas y guionistas que forman parte de la creciente industria del cine y la televisión del estado.