El presidente de Argentina, Alberto Fernández, se ha reunido este martes con un grupo de gobernadores para reunir apoyos y presentar un proceso de destitución contra el máximo responsable del Tribunal Supremo de Justicia, Horacio Rosatti, y la investigación de otros cargos en el máximo órgano judicial argentino.

«Hemos tenido una reunión con el señor presidente con el objetivo de propiciar la firma de un pedido de juicio político en el marco del artículo 53 de la Constitución Nacional, en virtud del mal desempeño de funciones de los cuatro jueces de la Corte Suprema de Justicia», ha indicado el gobernador de la provincia de Chaco, Jorge Capitanich, tal y como ha recogido la agencia de noticias Télam.

Sin embargo, la iniciativa impulsada por el presidente argentino no ha contado con el respaldo de gobernadores con cierto peso político como el de la provincia de Córdoba, Juan Schiaretti, o el de la provincia de Santa Fe, Omar Perotti, según ha informado el diario ‘Clarín’.

Fernández expuso el domingo en una carta pública que impulsaría junto a varios gobernadores un juicio político «para que se investigue la conducta (de Rosatti) en el desempeño de sus funciones». «También requeriremos que se investiguen las conductas de los restantes miembros del máximo tribunal», advirtió.

El caso se remonta a unas conversaciones entre el portavoz de Rosatti, Silvio Robles, y el ministro de Seguridad y Justicia porteño, Marcelo D’ Alessandro, en el marco de la disputa entre el Gobierno central y la administración de Buenos Aires por el reparto de fondos.