El Ministerio de Defensa de China ha vuelto a manifestar este viernes su “firme oposición” a la venta de armas por parte de Estados Unidos a Taiwán y ha instado a Washington a dejar de armar a la región con “armas de cualquier tipo”, alegando que es una “línea roja” infranqueable en sus relaciones bilaterales.
Desde la portavocía de Defensa han defendido que la venta de armas estadounidenses a Taiwán “ha transgredido gravemente el ‘principio de una sola China’ y los comunicados conjuntos China-Estados Unidos”, según declaraciones en respuesta a los medios recogidas por la agencia Xinhua.
“La medida ha socavado seriamente la soberanía y la seguridad de China, y representa una grave amenaza para la paz y la estabilidad a través del estrecho de Taiwán”, ha agregado el representante chino de Defensa, reiterando que “China está enérgicamente disconforme” con las ayudas concedidas a Taiwán por parte del Departamento de Defensa de EEUU.
A este respecto, el portavoz ministerial ha advertido de que “la cuestión de Taiwán es la primera línea roja que no se debe sobrepasar en las relaciones China-Estados Unidos” y ha subrayado que “apoyar a las fuerzas separatistas proclives a la independencia de Taiwán no sólo agravará las tensiones en la región, sino que conducirá a Taiwán a una situación peligrosa y, en última instancia, dañará al propio Estados Unidos”.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció a finales de julio de 2023 un paquete de ayuda armamentista a Taiwán por valor de hasta 345 millones de dólares (unos 313 millones de euros), en el marco de la Ley de Asistencia Extranjera de 1961, después de que el Departamento de Estado aprobara un mes antes una posible venta de armas a Taiwán por un valor de 440 millones de dólares (unos 400 millones de euros), una decisión a la que China también se opuso “firmemente”.
La más reciente concesión estadounidense a Taiwán llegó en abril de este año, cuando el Senado de EEUU aprobó un paquete multimillonario de ayuda a Ucrania, Israel y Taiwán por un valor total de unos 90.000 millones de euros. De ese total, Washington destinó 7.500 millones de euros para Taiwán, enfrascado en una histórica disputa territorial con China que en los últimos meses ha conocido un repunte de las tensiones.
Todo esto tiene como telón de fondo un aumento de las tensiones políticas entre China y Estados Unidos a cuenta de la isla, que ‘de facto’ funciona como un ‘territorio independiente’ pese a que Pekín reivindica su soberanía; lo que explica por qué Pekín cuestiona cualquier tipo de acercamiento de otros países a Taipei, así como sus críticas continuadas a los acuerdos o visitas realizados por altos funcionarios estadounidenses.