Los estudiantes sacaron buena nota en la “Gran toma de capitales”

Miles de estudiantes recorrieron este miércoles las calles de las principales ciudades del país, con el apoyo de sindicalistas, campesinos e indígenas, en otra jornada de protesta donde exigieron más recursos para las universidades.

La jornada denominada como la“Gran toma de capitales” transcurrió casi sin incidentes y ni siquiera un diluvio que cayó en Bogotá frenó a los manifestantes.

Junto a los estudiantes se manifestaron miembros de la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode), de la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia (CUT), así como organizaciones de campesinos y comunidades indígenas, entre otros.

Estas organizaciones también mostraron sus quejas por la reforma fiscal que prepara el presidente Iván Duque, pues consideran que afectará todavía más a la clase trabajadora y piden que se busquen alternativas para conseguir los fondos que busca el Gobierno para cubrir un déficit de 14 billones de pesos del presupuesto nacional de 2019.

En Bogotá y al revés que en anteriores ocasiones, las manifestaciones transcurrieron con normalidad y sin apenas enfrentamientos entre policías y manifestantes.

El único conato de violencia se produjo en el barrio Timiza, en el sur de la ciudad, donde un grupo de encapuchados se enfrentó con los agentes durante unos minutos.

Al menos cinco personas fueron detenidas y la columna, que había partido de una sede de la Universidad Distrital, continuó caminando hacia el centro de la capital.

También en algunas estaciones del sistema de transporte público Transmilenio, locales comerciales e incluso cuarteles militares, encapuchados hicieron algunas pintadas.

En la Carrera 68, una de las principales vías de la ciudad, hubo algunos enfrentamientos entre manifestantes y policías, tras los que un grupo de los propios estudiantes formó una cadena humana para proteger a los agentes.

El presidente, Iván Duque, sostuvo en Twitter que “salvo algunos casos aislados de vandalismo, Colombia vivió una jornada de marchas con tranquilidad”.

En las movilizaciones, precisó el mandatario, “predominó el respeto y derecho a la protesta”, al tiempo que agradeció a la fuerza pública por “preservar el orden y garantizar la seguridad de todos los colombianos”.

A su turno, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, afirmó que las marchas transcurrieron “con tranquilidad” y que todas aquellas personas que atentaron contra bienes ajenos “están siendo judicializadas”.

En esta ocasión, funcionarios de la Oficina para los Derechos Humanos de la ONU se reunieron al comienzo del día con la Policía y su Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) a quienes acompañaron durante parte de la jornada.

La Oficina aseguró que su labor fue la de “monitorear el respeto a los Derechos Humanos”, de acuerdo a su mandato, ya que manifestaciones anteriores terminaron en disturbios y actos vandálicos.

Asimismo, explicaron que antes de la nueva jornada de protestas hicieron “reuniones con autoridades nacionales y del Distrito y con estudiantes líderes de la marcha”.

En el parque San Andrés, ubicado en el barrio Engativá del occidente de Bogotá, confluyeron también muchos estudiantes que terminaron la manifestación en un ambiente festivo con batucadas, música y baile.

Publicado por nuestro portal aliado ElEconomistaAmerica.com con información de EFE.