Dos sucesos muy comentados en estos días, la perpetuación al poder de Daniel Ortega, el nuevo Somoza nicaragüense y que Amparo Grisales Patiño, la proclamada diva de la televisión colombiana, haya tratado de hombre a una mujer transgénero que participó en “Yo me llamo” que intentó llamarse Britney Spears.
En apariencia dos sucesos sin ninguna relación pero si los analizamos detenidamente tienen un trasfondo de ejercicio de poder sobre quienes no consideraron que tenían los mismos derechos que El y Ella. Naty terminó excusando a la Diva y hasta Yo la defendí porque lo otras y otros desde sus subjetividades consideraron transfobia, Yo solo lo consideré una estupidez y una profunda demostración de una ignorancia intencional tanto del Canal Caracol y de la querida y odiada por muchas y muchos, Amparito.
En el caso de Ortega, Él hasta encarceló a quienes se atrevieron a contenderlo en la justa presidencial, 7 en total, hasta acusándolos de procesos de corrupción, lavado de activos y demás para descalificarlos así como Amparo descalificó con suma ignorancia a Naty diciendo que Ella era un hombre… ¿Qué no sabe Amparo que existimos mujeres que nacen con vagina y otras que nacemos con pene? Las primeras llamadas Cisgénero y las segundas, Nosotras, llamadas Transgénero. El parecido en los dos procesos es esa ansía de descalificación que les pone en superioridad y que llevo a Ortega a un quinto período en el gobierno y a la Diva colombiana a niveles de impopularidad entre un grupo reducido de personas que quisieron lapidarla falazmente calificando de transfóbico un episodio de profunda tristeza para mí porque dejó en evidencia ignorancia en Ella pero también de asombro al empezar a considerar que en la madrugada Yeison Jiménez podría caer en “pecado”, en un placentero pecado…
¿Qué será lo que hace considerar a algunas personas al sandinismo como la alternativa válida para el pueblo nicaragüense y qué será lo que no permite que otras personas que no son como Nosotras no se sumen a las denuncias por el acto presuntamente “transfóbico” de Amparo y por qué no hubo la misma respuesta cuando se la auscultó el culo a quien intenta llamarse Alejandro Fernández? Se armó el barullo porque era la considerada agredida una marica que hasta Amparo reculó y pidió disculpas y Naty la excusó.
Yo no creo que el nuevo dictador nicaragüense, con esposa vicepresidenta, pida excusas a sus opositores inclusive los líderes y lideresas sociales que tiene a resguardo en las prisiones nicaragüenses… ¿tendrá a la esposa de vicepresidenta en un ejercicio machista patriarcalista porque Él es quien manda en casa? Vaya Usted a Saber…puede ser tergiversación así como muchas personas pusieron en la categoría de odio un episodio en el que se apuntó con una lupa a la genitalidad de Naty…se ve que no saben de nuestras habilidades para operarnos, esconder el pene y los testículos para andar con la “crica ahorcá’” al mejor estilo de presentadora y ex reina de carnaval costeña…
¿Cuándo empezaremos a dejar de criticar para empezar a formar a los medios y a quienes trabajan en ellos para evitar estos momentos de vergonzante ignorancia? Como lo dije en alguna ocasión, nos es más fácil ver la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio porque no obramos de igual manera cuando atacamos, destruimos, vilipendiamos en aras de desconocer y descalificar a la Otra que es como Nosotras…¿Por qué no lapidamos a esa gay macho, machote que considera inferiores a esos gais con maneras consideradas femeninas o plumíferas? ¿Por qué no arremetemos contra la transformista o contra la travesti que considerando que Ella es la mejor agrede a sus contendoras en los concursos de discoteca y hasta celebramos la hilaridad que nos causa el episodio? Porque la mayoría de Nosotras y Nosotros somos hipócritas y debemos reconocerlos, nos sumamos a los que pocas y pocos critican pero no obramos en consecuencia del respeto que otras y otros merecen…
Ojo con el proceso electoral venidero para Colombia, también debemos ser cuidadosas y cuidadosos por quien metemos el dedo…ah, que ya no se mete el dedo sino otra cosa, el tarjetón para que no nos terminemos convirtiendo en la perpetuidad de gobiernos que solo piensan en el bienestar de unas pocas personas que utilizan pendejamente pero hábilmente a otras…