El presidente de Chile, Gabriel Boric, ha descartado este viernes romper relaciones con Venezuela por las declaraciones del fiscal general venezolano, Tarek William Saab, que atribuyó a “funcionarios de Inteligencia chilenos” la muerte en territorio chileno del exmilitar venezolano Ronald Ojeda.
“En general, en política internacional, la regla general es que es indeseable romper relaciones por muchas diferencias que uno tenga con países”, ha señalado el mandatario chileno durante una entrevista con CNN Chile Radio, agregando que “la manera de solucionar los problemas es conversando, no dejando de conversar”.
Sus declaraciones se producen después de que anunciase en la víspera que se había puesto en contacto con el ministro de Exteriores de Chile, Alberto van Klaveren, para presentar cuanto antes “una nota de protesta como corresponde a los canales diplomáticos”.
Saab especuló con la posibilidad de que pudiesen haber participado en el crimen de Ojeda miembros de la Inteligencia chilena y extranjeros “con intereses espúreos” con el objetivo de “enturbiar las relaciones” entre ambos países.
Ojeda fue secuestrado el 21 de febrero en su domicilio de Santiago por tres personas que supuestamente se hicieron pasar por miembros de la Policía y su cuerpo apareció casi diez días después en el interior de una maleta sepultada bajo una estructura de cemento.