Duque y los avemarías ajenos

Mauricio Toro

Vuelve y juega, el Gobierno Duque tratando de sacar pecho con logros ajenos, esta vez, en un librito impreso que ha regalado a varios empresarios y personas de figuración pública, llamada “100 Logros del Gobierno Duque 2019-2020”, y en su puesto #25 saca pecho de la “Ley de pagos justos” (ni siquiera son capaces de escribir bien el nombre) y se refieren a la ley de nuestra autoría de Pago a Plazos Justos.

La Ley 2024, que establece que las facturas de todas las medianas, pequeñas y micro empresas se deben pagar en máximo 45 días, eliminando la nefasta práctica de pagar facturas a 180 y más días que estaban adoptando muchas grandes empresas, perjudicando y condenando a muerte a miles de mipymes en el país, fue precisamente una de mis promesas de campaña. El primer proyecto de ley que radiqué justo fue ese, y es que el dolor de los emprendedores y mipymes lo llevo en el alma. Por años, cuando me dedique al emprendimiento, sufrí el doloroso viacrucis de cobrar facturas a las grandes empresas, que exigían como condición para adjudicar un contrato, aceptar plazos extensos de más de 180 días, lo cual llevaba al traste cualquier intento por generar utilidades o construir una empresa competitiva.

El camino de la Ley de Pago a Plazos Justos fue largo y muy difícil. Aunque muchos congresistas no estuvieron de acuerdo en principio, y presentaron propuestas de archivo, o quisieron dilatar para que no se aprobará, e incluso radicaron proyectos muy similares pero con medidas opuestas para distraer y confundir, debo hacer un reconocimiento y decir que la Ley finalmente se aprobó con votaciones casi unánimes en sus 4 debates en Senado y en Cámara. Finalmente el ejercicio de legislar es precisamente ese contrapunteo de ideas y posiciones, y es sano siempre y cuando se haga en forma transparente, digna y leal. Por lo tanto, aunque el Proyecto fue de mi autoría, debo reconocer el apoyo decidido de miembros del Partido Liberal y de Cambio Radical; y finalmente debo agradecer los votos positivos de partidos que se opusieron al Proyecto pero finalmente compartieron los argumentos y votaron positivamente, como el Partido Centro Democratico.

También reconozco el rol gallardo de Fenalco, que siempre fue un interlocutor que hizo su mejor esfuerzo para tener argumentos y contraargumentos, fundamentado en cifras y estudios para hacer del proyecto una mejor propuesta y matizar los puntos que les generaban preocupación ante los posibles efectos para la economía y las grandes empresas. Algunas de sus propuestas ayudaron a lograr un texto concertado que finalmente fue aprobado con el voto de todos los partidos políticos.

Por otra parte, el rol de la ANDI fue nefasto, usando argumentos falaces, noticias mentirosas, y acudiendo a estrategias amañadas para sabotear el debate legislativo. No los culpo, quizás esas tácticas les han funcionado en el pasado y creen que aún hoy con una sociedad hiperconectada, informada y vigilante, pueden seguir moviendo los hilos del poder para su beneficio sin que nadie lo note.

Pero los grandes ausentes de este debate fueron precisamente el Presidente Duque y sus funcionarios, empezando por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo. Múltiples fueron los intentos de los funcionarios del Ministerio y en especial de su viceministro Saul Pineda para sabotear y alterar el debate del Proyecto. Con conceptos ambiguos y tendenciosos, con argumentos falaces, y con estrategias de poca lealtad parlamentaria como proposiciones de archivo o de aplazamiento. Incluso faltando pocas semanas para el fin de la legislatura, promovieron la propuesta de audiencias públicas y subcomisiones, sabiendo que dichas proposiciones matarían el proyecto por falta de tiempo.

De no ser por la presión mediática de varios medios de comunicación, y en especial del equipo de W Radio que se la jugó a favor de las mipymes, muchas de estas estrategias del Ministerio de Comercio habrían sido efectivas y habrían dado con el archivo del Proyecto.

Por eso me resulta tan irónico y vergonzoso que el Gobierno Duque venga a sacar pecho por un proyecto de ley que no sólo no apoyó, sino que gestionó muchas veces para frenarlo o hundirlo. Los conceptos emitidos por el Ministerio de Comercio son de público conocimiento, así como las intervenciones del viceministro en los debates y las audiencias por si quieren verificar y hacerse a su propia idea. La intención de hundir el proyecto, o deformarlo para hacerlo inoperante, son claras y evidentes en dichos documentos e intervenciones.

Tan vergonzosa fue la actuación del Gobierno, que en el acto oficial de promulgación de la ley, de forma mañosa, decidieron no invitarme, y en vez de darle la voz a los principales promotores del proyecto, los ponentes en ambas Cámaras, prefirieron darle la voz a aquellos miembros de bancada de gobierno que más oposición presentaron al proyecto. Y en un acto infantil y vergonzoso, Duque en su discurso sacó pecho porque supuestamente esta era una de sus promesas de campaña y la estaba cumpliendo (luego revisamos sus documentos de campaña, tanto los radicados en la Registraduría como los publicados en su página web, y en ninguna parte habla de la problemática por los pagos a plazos extensos de las mipymes).

Después de esa infantil e inmadura acción, decidí “echarle tierrita”, y dejar atrás la actitud ridícula de este gobierno en cuanto al proyecto de Pago a Plazos Justos; pero ahora resulta esta publicación de los 100 logros de Duque y ubican en el puesto 25 este proyecto de nuestra autoria, y que el Gobierno tuvo toda la intención de hundir y sabotear. Este Gobierno, tan de poca monta, necesita de los logros ajenos para sacar pecho. Un Gobierno que se ha dedicado a perpetuar la desigualdad y la inequidad, a mantener el status quo propio de la enorme inequidad que viven los colombianos. Es un Gobierno tan ineficiente que necesita robarse los logros de otros para maquillar sus pésimos resultados.

Un gobierno sin pena y sin orgullo, que no tiene ningún reparo en robarse méritos ajenos de la oposición. Este es un Gobierno que cree que puede engañar y mentir sin que nadie se de cuenta. No se si es ingenuidad o exceso de mezquindad. Finalmente, viendo las cosas desde otro punto de vista, debo decir que me siento muy orgulloso de ser el autor y promotor de una Ley que es tan importante y necesaria para los empresarios de este país, que el Gobierno Duque (a pesar de haber querido hundirla hasta último momento) tiene que reconocerla como el hecho #25 en importancia durante su gobierno, aún cuando haya sido su Gobierno uno de los principales opositores. Vergonzoso! Por lo pronto, seguiremos proponiendo ideas para favorecer a los emprendedores y ciudadanos, a ver si el Gobierno no solo se roba los logros, sino que ayuda a aprobarlos más rápido.

@MauroToroO